lunes, 31 de agosto de 2009

Venezuela en transicion - 6 entregas


UNA SERIE DE REPORTAJES Y ENTREVISTAS DE PAOLO LUERS
Obligados a unir fuerzas

La oposición venezolana está generando un nuevo liderazgo y preparando un cambio generacional, cultural y político.

"Chávez es del pasado"

Conversación con Henrique Capriles Radonski, gobernador de Miranda, la nueva estrella de la oposición venezolana.


No dejan hacer, pero tampoco hacen

La izquierda venezolana siempre había luchado por descentralizar el poder, hasta que llegó Chávez

El alcalde cruza la calle

La radio tiene un enorme arraigo popular. Chávez decidió sacar las radios independientes y sustituirlas por "comunitarias"


El garrote guardado

Una ley de Delitos Mediáticos, que apareció una madrugada y desapareció en la siguiente, penalizaba el ejercicio periodístico

La Lay Especial contra Delitos Mediáticos

La conflictiva ley sirvió para asustar a los dueños de los medios y los periodistas independientes
"Los medios somos el único poder independiente del gobierno"

El Diario de Hoy entrevistó a Miguel Henríquez Otero, quien dirige el periódico El Nacional.


“¡No nos callarán!”,
la batalla por las frecuencias radiales


De la noche a la mañana sacaron del aire a 34 emisoras, dejando muchas regiones del país sin radios independientes.

La radio es mía

La radio tiene en Venezuela un enorme arraigo popular.
”Se metieron con un poder popular”

Marisel Parraga se hizo famosa en el programa Aló Ciudadano. Ahora es vocera de la lucha de las radios por la pluralidad


“Vamos a luchar por el pluralismo”

Entrevista con Ibeyise Pacheco, locutora y reportera de Radio Venezuela, e integrante del grupo fundador de la Fundación La Radio es Mía.
Globovisión en la mira

La guerra mediática entre un gobierno que quiere control y medios que insisten en su independencia y su derecho a la crítica está escalando.
"El líder de la oposición no puede salir de los medios"

Muchos piensan que Alberto Federico Ravell, el director de Globovisión, es el verdadero líder de la oposición.
Lobo herido, más peligroso

Una segunda mirada a Venezuela. Luego de la serie "Venezuela Adentro", publicada en marzo del 2008, los conflictos políticos se han profundizado.
“No basta ser mayoría, hay que saber imponerse”

Entrevista a Leopoldo López, el político que organiza “redes populares” en los sectores donde el chavismo pierde apoyo.

sábado, 29 de agosto de 2009

Carta a los dirigentes empresariales


Estimados señores de los gremios empresariales:

Espero la hayan pasado galán en Casa Presidencial el día jueves. ¡Que bueno que el señor presidente les haya invitado para discutir sus políticas de Seguridad Pública! Oportunidad de oro para decirle: ¡Así no, señor!

Sólo que no escuchamos a nadie decir esto. Así como luego del acto de juramentación del presidente Funes, todos los cabezones salieron de la Feria diciendo “que bonito discurso”, aunque el señor les acaba de dar una gran paliza, igual ustedes salen hoy diciendo: “Que bueno que el señor presidente tenga por bien involucrarnos...”

¿Pero ustedes le dijeron en la cara al presidente lo que piensan de su gabinete de seguridad?

Cuando el presidente el jueves les pidió colaborar con la PNC patrocinando las unidades especializadas contra secuestro y chantaje, ¿le preguntaron porqué permitió que descabezaran la unidad investigativa DECO? ¿Ustedes le dijeron al presidente que su ministro descabezó la DECO precisamente con el argumento de que estaba casi privatizada por el patrocino de la empresa privada? ¡Y hoy les pide patrocinio!

¿Y le dijeron al presidente que a los empresarios les parece insólito que él les pida revivir la iniciativa de Tony Saca y René Figueroa de una campaña por la paz social?

Deberían haberle dicho todo esto. Y otra cosa más: Que les convoque cuando tenga una política de Seguridad que presentar – y un equipo para implementarla.

Tal vez en la próxima cita en Casa Presidencial.

Saludos, Paolo Lüers

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jueves, 27 de agosto de 2009

Columna transversal: El error de Uribe

El presidente Álvaro Uribe, de Colombia, está al punto de cometer el error que puede resultar destruyendo su propia obra: convertir Colombia en un bastión de la democracia contra el autoritarismo.

Si Álvaro Uribe no para en seco esta locura de un referéndum para cambiar la constitución colombiana para permitir al presidente un tercer período presidencial, les está dando legitimación a los más acérrimos enemigos de la consolidación democrática de Colombia: sus vecinos bolivarianos Hugo Chávez y Rafael Correa y sus clones en toda América Latina, y las FARC.

Consecuencia de esto, lo que se ha contenido en Honduras -a un enorme costo político, social y económico para los hondureños- agarraría nuevo brillo y ánimo en otras latitudes: la tentación de seguir el ejemplo (más bien, el guión) de Hugo Chávez de usar la insatisfacción de los pueblos para deslegitimizar las democracias representativas, cambiar las constituciones y, de paso, quedarse con el poder. Esta tentación existe en muchos movimientos políticos de América Latina. Existe latentemente en muchos gobernantes quienes no saben establecer su liderazgo sin atentar contra la institucionalidad del país y contra los equilibrios entre poderes. Manuel Zelaya es el mejor ejemplo de un presidente que se metió a sus aventuras de ‘democracia directa’ y ‘movilización del pueblo’ - principalmente por debilidad, por incapacidad de gobernar dentro del marco de la Constitución y de la división de poderes.

Zelaya no era el único presidente débil en nuestras latitudes. Hay varios que enfrentan situaciones difíciles con sus propios partidos, con movimientos sociales radicalizados, con problemas de gobernabilidad, con poderes institucionales y fácticos que se convierten en frenos para su proyecto político, con resistencias en las propias filas de buscar consensos con los demás poderes...

Estos problemas de gobernabilidad en varios países se pueden resolver haciendo esfuerzos de concertación, dentro del marco de la institucionalidad y del equilibrio de los poderes - o pueden tratar de resolverse rompiendo la institucionalidad y usando presión de movimientos populares para cambiar las reglas del juego. Cual de las dos opciones se busque, depende, entre otras cosas, del contexto internacional y de los antecedentes. En este sentido, lo que pasa en Honduras y lo que pasará en Colombia, es de mucha importancia para toda la región.

El efecto positivo de Honduras -donde el conjunto de instituciones y fuerzas democráticas no permite que el presidente de La República atente contra la alternancia en el poder- quedaría neutralizado, si Álvaro Uribe en Colombia no toma una posición inequívoca de suspender el referéndum y dejar claro que no buscará la reelección.

Quienes en el pasado han apoyado a Álvaro Uribe, a veces a altos costos políticos, en su esfuerzo de reconstruir y consolidar la institucionalidad democrática de Colombia, ahora deben ayudarle a Uribe a tomar la decisión correcta, para él, para Colombia, para el continente latinoamericano.

Muchos, aunque a regañadientes y con dolor de estómago, han apoyado a Álvaro Uribe cuando al término de su primer mandato planteó: La obra no está terminada, necesito más tiempo. Tal vez tuvo razón y su reelección era un mal necesario.

Pero este mismo argumento ya no vale. En ocho años, Colombia ha cambiado, en gran parte gracias a Álvaro Uribe, quien ha tenido tanto éxito en reconstruir la democracia colombiana que ahora no importa quien gane la presidencia, Colombia va a estar bien.

Ahora, para completar la construcción de la democracia colombiana, hay que abandonar las muletas de populismo, continuismo y liderazgo carismático y seguir dejar que la institucionalidad funcione. Otro período con Uribe sería un retroceso, y además un golpe bajo a todos que en América Latina están trabajando para contener a los Zelayas y Ortegas que bailan al ritmo de las canciones de Hugo Chávez.

(El Diario de Hoy)

Carta a Barack Obama


Dear Mr. President:

Demasiado presidentes de otros países me están saliendo últimamente que necesitan que les mande cartas. Prometo que las próximas cartas las voy a mandar a gente normal.

Pero este su piquete que hizo de suspender las visas a los hondureños no puede quedar sin carta de respuesta.

Puedo entender que usted necesitaba mostrar a América Latina que usted no es yanqui feo como Bush, sino yanqui bueno. Bueno, para mostrar cara de buena gente, hubiera podido levantar el embargo a Cuba. Pero entonces, le lleva judas con los gusanos en Florida.

O hubiera podido retirarse de Colombia. Pero entonces, se le viene para abajo la guerra contra los narcos.

Entonces, decide cagarse en Honduras. Who gives a shit about f... Honduras, right? Los pobres catrachos se han echado encima el huevo de parar en seco la revolución bolivariana, sacando a Zelaya. Seguramente sabían que usted los iba a regañar. Lo que no sabían es que les iba cobrar tan caro el favor de enfrentarse a Chávez.

Está bien que no les dio gracias en público. Se entiende. Incluso que les haya retirado préstamos - este costo están dispuestos a pagar los catrachos por mantener sus libertades.

¿Pero suspender proyectos humanitarios? ¿Negarles las visas a los estudiantes becados o a los familiares de ciudadanos estadounidenses de origen hondureño? Give me a break, Mr. President!

¿Cuándo es la última vez que Estados Unidos sancionó de esta manera a todo un pueblo? ¿Cuántos crímenes pudieron cometer países como Libia, Irán, Rusia, China sin ser sancionados de esta manera? Incluso a los cubanos les dan visas, siempre y cuando los dejen salir de la isla.

Usted le debe una a Honduras, Mr. President! Pero una buena.

Take care, Paolo Lüers

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martes, 25 de agosto de 2009

Carta a Álvaro Uribe, presidente de Colombia


Estimado Álvaro Uribe:

No puedo creer que esté buscando reelegirse para un tercer período.

Le pido un gran favor: ¡Pare esta locura del referéndum! Porque si no, nos van a salir un montón de Zelayas por todas partes buscando cambiar sus constituciones para gobernar ¡toda la viiiiida!

Hasta aquí en El Salvador podría picarle a algún presidente la tentación de imitar a Álvaro Uribe...

Todavía la primera vez que usted cambió la constitución para reelegirse, medio se podía entender. Estaba muy tierna la obra de consolidar a Colombia y -tal vez, quien sabe- tenía sentido un segundo mandato. Pero en ocho años, usted ha cambiado Colombia. Usted ha tenido tanto éxito en reconstruir la democracia colombiana que no importa quien gane la presidencia, ¡Colombia va a estar bien!

Retírese ahora que todo el mundo lo quiere – y no cuando todo el mundo esté cansado de un residente que nunca se va.

Deje esta locura de gobernar eternamente a Chávez, no le de legitimidad a la maña de aferrarse al poder. Haga que cualquier loco que quiere jugar con la constitución tenga que salir del closet como clon de Chávez – y no pueda legitimarse con alguien como Uribe.

De antemano, agradeciendo su atención a nuestra petición,

Paolo Lüers

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sábado, 22 de agosto de 2009

Carta a Ricardo Martinelli, presidente de Panamá


Estimado presidente:

no sé si se ha dado cuenta, pero aquí todo el mundo está pegando gritos al cielo, porque usted quiere que Panamá se retire del PARLACEN.

Pero usted tiene razón: El Parlamento Centroamericano no sirve para nada, sólo para proveer de inmunidad, salarios y prestaciones a los políticos que ya nadie quiere tener en los parlamentos y gobiernos de cada país.

Los parlamentos sólo tienen sentido si tienen poder y pueden legislar. Al Parlacen nadie le hace caso.

Gracias, presidente, por la iniciativa de abolir el Parlacen. Que vean los partidos qué diablos hacen con los ex-dirigentes que les sobran...

Dicen que sin el Parlacen no habrá integración centroamericana. Bueno, de todas formas no hay, con o sin Parlacen. Sólo nos da la ilusión de unidad.

Que bueno que usted le dio un pinchazo a esta fantasía mentirosa de un parlamento donde ni siquiera hay voluntad de integración.

No se deje impresionar de las lágrimas de cocodrilo que todos están derramando sobre el cadáver del Parlacen. Ayúdenos de darle cristiana sepultura.

¡Y cuando haya integración, hagamos un parlamento de verdad!

Hasta pronto, Paolo Lüers

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jueves, 20 de agosto de 2009

Carta a los sufridos magistrados de la Corte Suprema


Honorables magistrados:

Me da mucho pesar escuchar que ‘el cambio’ está poniendo en peligro sus conquistas sociales. ¿Cómo es posible que la Asamblea eligiera a un presidente que atente contra el bienestar social de sus colegas? Es inédito.

Dicen que algunos de ustedes tuvieron que entregar 2 de los 4 vehículos y 5 de los 6 celulares (con línea pagada por el Estado), a los cuales han tenido derecho durante años. Realmente no sé cómo se van a movilizar y comunicar ahora sus hijos y su amantes.

Pero lo más increíble que he escuchado –por el bien del país quiero pensar que es puro chambre- que les han reducido a niveles ridículos el presupuesto para licores, recepciones y banquetes. No puedo concebir cómo la honorable Corte podrá hacer justicia si sus integrantes están obligados a celar la compra de cualquier botella de Whisky o Champán.

Ustedes tienen que tener la cabeza libre para pensar en la justicia, la prontitud y la constitucionalidad, sin compartir las preocupaciones cotidianas de todos nosotros del precio de Cinta Azul y de la gasolina.

Ustedes, los veteranos de la Corte que han servido durante años a la patria, no permitan que lleguen unos novatos para quitarles lo merecido.

Acuérdense de la vieja consigna sindical: ¡Lo conquistado no se entrega!

A lo mejor esta es la idea: un sindicato de magistrados que defienda su bienestar social. Me ofrezco de asesor – si me pagan lo justo...

Saludos fraternos, Paolo Lüers

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miércoles, 19 de agosto de 2009

¿Depuración o alineación?


“Una estructura policial que está preparada para combatir un tipo de criminalidad como la organizada, como el secuestro, extorsiones, hurto y robo de vehículos, así como pueden combatirla también saben como hacer esos delitos.”

Así explica Jaime Martínez (en una entrevista reciente en un servicio informativo digital) el descabezamiento - a manos del gobierno ‘del cambio’- de la DECO, la unidad especializada de la PNC contra el crimen organizado. Jaime Martínez, como nuevo director de la Academia Nacional de Seguridad Pública es una de las piezas claves en equipo al que Funes ha encomendado el diseño de su política de Seguridad Pública.

Sin tanto rodeo, lo que está diciendo el encargado de la formación de nuestros policías es: “Había que remover a los jefes de la DECO -los más experimentados investigadores de secuestros y otros delitos de crimen organizado- para evitar que se vuelvan secuestradores y mafiosos. Si no es que ya se han convertido...”

Entonces, ¿porque no sabemos de ninguna investigación contra los ex-jefes de la DECO, ni en la Fiscalía, ni en la Inspectoría de la PNC?

O al revés, si no hay investigación ni elementos que indiquen que los ex-jefes de la DECO hayan cometido delitos, ¿por qué un alto funcionario del gobierno se atreve a hacer alusiones de este tipo, que dejan en duda la reputación de unos jefes policiales hasta ahora considerados ejemplares y eficientes?

Aparte de las declaraciones irresponsables de Jaime Martínez, hasta ahora nadie ha señalado a los ex-jefes de la DECO como delincuentes. Más bien se ha manejado -sobre todo en las filas de la propia PNC- que los removieron porque estaban demasiado cercanos al anterior director de la PNC y al anterior ministro de Seguridad.

Esto podría ser un razón legítima para sustituirlos de sus cargos. Pero entonces habría que discutir este tema político. Habría que tocar con transparencia que dentro de la PNC hay un problema sensible: las alineaciones partidarias de algunos mandos.

Tocar con transparencia este punto delicado sólo tendría sentido para un gobierno que tiene la voluntad de erradicar estas alineaciones partidarias dentro de la PNC, o por lo menos la voluntad de dejar de construir su liderazgo en la policía sobre la base de las alineaciones partidarias de los policías.

Si el nuevo ministro de Seguridad (o el residente de la República) ordenó la remoción de los jefes de la DECA para que la nueva dirección de la PNC tenga las manos libres para implementar sus nuevos planes de Seguridad Pública, sería entendible. Significaría que quieren colocar jefes más comprometidos con los nuevos planes.

Pero si ordenaron el descabezamiento de la DECO para tener manos libres para fortalecer su control partidario dentro de la PNC, cometieron un grave error.

Por la falta de transparencia, y por las declaraciones irresponsables del director de la Academia de Seguridad Pública, uno se inclina a la impresión que los nuevos planes para la PNC de cómo enfrentar la delincuencia (que todavía no las conocemos bien, ni en su filosofía ni en su parte operativa) no están basados en la acumulación de experiencias y acciones exitosas.

Da la impresión, además, que los nuevos planes de Seguridad Pública no se están construyendo sobre la base de la confianza profesional entre los policías y jefes, independiente de su pasado y de sus preferencias políticas. Más bien parece que se quiere construir sobre la base de confianza ideológica.

Sería una base muy frágil para un proyecto de Seguridad Pública y para consolidar una policía profesional. Frágil y engañosa.

La celebración de reuniones de carácter político-partidario dentro de la PNC, promovidas y convocadas por el ministro de Seguridad y otros cuadros del FMLN, ya indicaba esta tendencia. Muchos de los nombramientos, ascensos y movimientos dentro de la estructura de mando de la PNC confirmaron las dudas. El descabezamiento de la DECO y las lamentables declaraciones de Jaime Martínez ya dejan espacio para dudas: ‘El cambio’ llegó a la PNC, pero no para hacerla más profesional, sino más ‘oficialista’.

(ElDiario de Hoy)

martes, 18 de agosto de 2009

Carta al alcalde Norman Quijano


Estimado Norman:

estoy de regreso, con más fuerza y ganas para seguir jodiendo.

El Frente no quiere que cumplás. No quieren que logrés poner el Metrobus. Ya lo dijeron.

Es la vieja política del Frente de no hacer y tampoco dejar que otros hagan.

Estando en el gobierno, podrían dar inicio a la reforma del transporte público. No sólo no lo hacen, sino además te están bloqueando el proyecto Metrobus.

Ojala que no te rindás, Norman. La gente te apoya. La empresa privada te ayuda. Donde te bloquea el gobierno, apoyate en la gente y en la empresa privada. Así como lo estás haciendo con los parques y las plazas, con la limpieza de la ciudad, con la basura.

Avanzando así, al fin obligarás al gobierno a cambiar y a apoyarte en tus proyectos estratégicos: el Metrobus, para llevar San Salvador al Siglo 21; y las bóvedas, para convertir las quebradas de criaderos de ratas y mareros en parques y colonias.

Te tienes que convertir en el alcalde tan exitoso y popular, que el gobierno de Funes no se puede dar el lujo de sabotearte.

Paolo Lüers

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jueves, 13 de agosto de 2009

COLUMNA TRANSVERSAL: Entre mudo y tartamudo


Sigamos con el tema del periodismo. Ya terminó el ‘mes del periodista’ - sigue lo cotidiano. Continua la arrogancia del gobierno Funes frente a los periodistas que buscan información, entrevistas, transparencia. El interrogador no contesta preguntas. Y sus ministros y otros funcionarios dicen que el único autorizado a hablar es el presidente.

Todo se cocina en secreto. La política se proyecta como conspiración. Las negociaciones legítimas y necesarias parecen trueques.

¿Qué pasó con la transparencia y la rendición de cuentas, las dos palabras que aparecían en cada capítulo de ambos programas de gobierno?

¿Por qué el presidente Funes no puede, como lo hacen la mayoría de sus colegas, convocar conferencias de prensa semanales para contestar las preguntas que la sociedad le hace mediante los medios?

¿Por qué el secretario de Comunicaciones de Casa Presidencial no es capaz de explicar cuáles son los mecanismos y canales de la comunicación de este gobierno? En una entrevista en El Faro, tartamuda ante las insistencias del reportero de que explique la política de comunicación del gobierno.

La comunicación de este gobierno está centralizada en manos de Casa Presidencial como pocas veces en la historia. Y Casa Presidencial está entre mudo y tartamudo. ¿Y entonces?

Siempre cuando pasa esto, detrás hay algo que quieren esconder. En este caso parece que lo que quieren esconder es el desorden, la improvisación, la ineficiencia que todavía sigue caracterizando al gobierno a más de dos meses de haber asumido el poder.

¿O serán que quieren esconder las contradicciones que siguen existiendo dentro del gobierno, entre los hombres del presidente y los hombres del partido?

Todo esto es mucho más grave que la incapacidad comunicacional de un grupo de comunicadores encabezado por un comunicador. Es más grave que un problema de información. Es un problema de debate.

Un gobierno nuevo, como es natural, se topa con resistencias, contradicciones, problemas. Pero la mayoría de estos obstáculos sólo serán resueltos si la opinión pública interviene, presiona, y toma posición. Para facilitar esto, se necesita debate. Y para debatir, se necesita información. Y transparencia: Tienen que ser claras las posiciones de cada uno, y lo que está en juego.

Resolver este tipo de problemas en secreto, conspirando en vez de debatiendo, no le conviene a ningún gobierno. Sólo los gobiernos autoritarios se pueden dar este lujo, ya que en última instancia no les importa el debate, la opinión pública, las acuerdos. Imponen sus soluciones. Y punto.

El gobierno Funes no puede gobernar imponiendo. No tiene las mayorías, no tiene los amarres institucionales, no tiene los mecanismos. Ni creo que tenga las intenciones. Está, por suerte, condenado a debatir, a crear correlación de fuerza en la opinión pública. Este gobierno tiene que comunicarse con los medios y las personas que crean opinión pública. No sólo con los medios de comunicación, sino igualmente con universidades, tanques de pensamiento, empresarios y gremios de profesionales.

Lo peor error que puede cometer el presidente Funes es brincarse de los medios (y los demás intermediarios) y apostar a un discurso populista y demagógico: el líder hablando a su pueblo. Al estilo de Hugo Chávez. El costo sería altísimo. Al principio funciona, pero al rato se vuelve monólogo tragicómico. Y la opinión pública no se gana con monólogos. Entonces, surge la necesidad de reprimir la libertad de prensa, a cerrar radios y canales y sustituirlos por medios estatales.

Estoy convencido que, a parte de los ‘bolivarianos’ duros en el partido y en el movimiento de calle, nadie quiere llegar a esto. La mejor manera de prevenirlo, para el presidente y su gobierno, es apostar a más transparencia, más debate, más información.

(El Diario de Hoy)

domingo, 2 de agosto de 2009

Con estos finalistas no llegan a nada


Si Henry Campos hubiera tenido paciencia, ya fuera Fiscal General de la República. Como no vio claro cómo los partidos iban a resolver el empate para elegir magistrados de la Corte Suprema y fiscal, Campos cometió el error de aceptar la oferta del presidente de entrar al gobierno.

Digo error porque sigo pensando que Henry Campos hubiera sido el hombre ideal para la Fiscalía: capaz, valiente e independiente. Obviamente sigue siendo capaz y valiente -incluso más que todos los demás candidatos a la fiscalía-, pero ya no es independiente. Tomó la decisión de formar parte del gobierno del FMLN y Funes. Tomó partido. Se hizo parte en este juego de pesos y contrapesos, donde la Fiscalía tiene un rol, y el ejecutivo otro. ¡Qué lástima!

Ya hace meses escribí que Campos era el mejor candidato para la Fiscalía. La derecha tuvo sus dudas y resistencias con él, igual que las tuvo con Sidney Blanco y Florentín Meléndez para la Corte Suprema. Pero la derecha se vino convenciendo que ser de izquierda no es impedimento para que alguien sea independiente de amarres partidarios y de decisiones apegadas a la ley. Algunos en la derecha incluso se convencieron –y por eso no sólo aceptaron a Sidney Blanco sino promovieron además a Florentín Meléndez- que no hay mejor antídoto contra los peligros de la izquierda ortodoxa y autoritaria que personajes de la izquierda independiente y democrática. En este sentido, el siguiente paso lógico hubiera sido elegir a Henry Campos fiscal.

Por esto es tan lamentable que Henry Campos, en vez de arriesgarse y seguir apostando a la Fiscalía, se fue por el atajo y se hizo parte del gobierno Funes. Adiós independencia, adiós Fiscalía...

Porque exigir a la oposición que acepte como fiscal general a uno de los protagonistas de la política de seguridad del gobierno Funes –política que ella considera errática y peligrosa-, es lo mismo que exigir al FMLN que acepte a Astor Escalante, quien fue artífice de la política de seguridad del gobierno Saca, la cual el FMLN consideró errática y peligrosa. Estamos de regreso al empate y mutuo bloqueo...

Para romper el empate, era correcta y lógica la decisión de la Asamblea de volver a abrir la lista de candidatos a fiscal. No puedo entender cómo la lista de más de 80 aspirantes se haya reducido a una lista de cuatro, de los cuales nada menos tres son ex-viceministros de Seguridad (dos de Saca y uno de Funes), y el cuarto está vinculado históricamente al FMLN. Otra vez empate y bloqueo. De regreso al punto de partida. Al punto muerto.

No me van a decir que entre los 80 aspirantes no hubo nadie que cumpliera los requisitos profesionales que no sea viceministro o ex viceministro de Seguridad. No me van a decir que no haya nadie independiente que quiere ser fiscal general.

A saber con qué criterios los negociadores de los partidos han hecho la reducción de la lista a los cuatro (o dos, como muchos dicen) finalistas. Pero no pueden mantener esta reducción. Tienen que abrir la lista nuevamente, y aplicar un criterio diferente para reducirla a finalistas: eliminar a todos los candidatos que tienen amarres partidarios; luego eliminar a los que son responsables de la política de seguridad del gobierno y los que han sido responsables de la política de seguridad de los últimos gobiernos. Esto no excluye a los cuadros profesionales que han servido o sirven de fiscales. Pero sí a los viceministros...

De los independientes y no comprometidos hay que buscar a los han mostrado más capacidad y valentía.

El fin de todo el proceso es encontrar a un Fiscal General que goce de la confianza de ambos bloques políticos. Sólo así tendrá capacidad de realizar las reformas radicales que necesita la Fiscalía para cumplir su mandato constitucional.

Así que déjense de las pajas de estar proponiendo cada uno a sus hombres de confianza. Aprovechan las vacaciones para reflexionar. Tómense unos tragos bien helados para regresar con cabeza fría. Tengan la audacia de poner la Fiscalía en manos de alguien independiente.

(El Diario de Hoy)

sábado, 1 de agosto de 2009

Carta a un ex magistrado del Tribunal Electoral

Querido Mario Salamanca:

la democracia es una mujer caprichosa. Es imperfecta. A veces es injusta. Pero a pesar de todo, hay que serle fiel. Ni modo...

¿A quién le cuento esta verdad? Vos la acabas de vivir en carne propia. Acaban de nombrar a los cinco magistrados del nuevo Tribunal. El único que no fue reelegido fuiste vos. Aunque para muchos has sido el magistrado más capaz y más independiente.

Los cuatro que de manera abierta y a veces descarada corresponden a intereses partidarios, siguen. El magistrado que ha tratado de responder al país, a la transparencia y la razón común, está afuera.

No se si a vos te da rabia. A mi sí. Es un pésimo mensaje. No lo entiendo. De Reforma Electoral ya nadie habla. Todo sigue igual, sólo que ahora el presidente del Tribunal es del Frente, y que el independiente ya no está. No conozco al señor que te sustituye. Ojala que no sea peón de nadie.

Te deseo suerte en tu carrera judicial. Lástima que no te inscribiste como candidato a fiscal. Me imagino que te dio pena autoproponerte...

Saludos, Paolo

(Más!)