martes, 30 de octubre de 2018

Carta a los presentes y futuros gobernantes: Ante el éxodo, ¿tienen respuestas?

¿A alguien le extraña que haya gente que se mete en aventuras como las caravanas de migrantes que emprenden la marcha a la frontera de Estados Unidos?
A mi me extraña que no sean más.

Las 100 familias que en mayo de este año fueron desalojados del Espino sobrevivieron (no sé cómo) los 5 meses del invierno en un campamento precario cerca de la Cancillería – y todavía están ahí. No son usurpadores de tierra, nacieron en esta finca, como parte de la Cooperativa El Espino. Ni los desarrolladores que reclamaron estos terrenos, porque habían entregado a gobierno otros para construir la Diego de Holguín; ni a alcaldía de Antiguo Cuscatlán; ni el gobierno central han sido capaces de crear condiciones dignas, humanas y saludables para un grupo de no más de 100 familias. ¿Qué piensan ustedes que detiene a esta gente en nuestro país? ¿Por qué no se van a unir a una caravana de desesperación, si de todos modos van a dormir en la intemperie? Tal vez porque algunos de ellos por lo menos tienen algún tipo de trabajo, aunque sea informal. ¿Pero los que ni esto tienen?

¿Qué hacen ustedes, los gobernantes locales y nacionales, para darles incentivos de quedarse? ¿Qué hace la sociedad en su conjunto? No me digan que un municipio como Antiguo Cuscatlán, el más próspero del país, no puede absorber a 100 familias desalojadas, que siempre han sido parte de municipio? Tampoco me digan que el gobierno central no se puede hacer cargo a construirles viviendas, en vez de tratar de convenceros a mudarse a La Campanera.

Centenares de otras familias son desplazadas de sus viviendas y comunidades por la violencia. Unas huyen de las pandillas, otras de los operativos policiales – la mayoría de ambos. Pero el gobierno ni siquiera reconoce que existe el fenómeno masivo de desplazamiento interno, porque no coincide con la imagen propagandística que quiere vender de que nunca ha perdido control de muchos territorios. Muchos de estos desplazados ya han buscado llegar a Estados Unidos sin permiso migratorio. ¿Qué los detiene ahora que surge la opción de un éxodo colectivo, que sustancialmente baja los riesgos de viaje?

Si ustedes, los gobernantes, no responden a estas emergencias, la caravana de 300 personas que salió en estos días de El Salvador no será la última. Y las complicaciones que ya se están dando con Estados Unidos serán mucho más profundas…

Sumen a estos desplazados por violencia las familias que cada invierno son víctimas de inundaciones y cada vez pierden lo poquito que tienen – y pronto también la paciencia y la confianza en que ustedes, los gobernantes de sus municipios y de su país, en algún momento van a atacar de fondo la vulnerabilidad permanente en que ellos (sobre)viven. ¿Cómo los van a convencer a no unirse a la próxima caravana? ¿Con discursos y buenos consejos?


Hago extensa esta carta y estas preguntas a los futuros gobernantes, a los que pretenden gobernar luego de las próximas elecciones. ¿Cómo piensan afectar la vida de estos grupos vulnerables para que no tengan que ir a romperse la madre en las fronteras militarizadas de México y Estados Unidos?


Saludos,

(MAS! y EL DIARIO DE HOY)

sábado, 27 de octubre de 2018

Carta al FMLN y ARENA: La regla de Tarzán

A esta altura, con más de 100 días sin Sala Constitucional, me parece increíble que ustedes, las dos fuerzas políticas que juntos lograron poner fin de a la guerra y la transición a un sistema democrático y pluralista, no hayan tenido la capacidad de resolver este problema.

Parece que eso se debe a dos causas combinadas: El FMLN no se atreve a abandonar a GANA en su decisión de entrampar la elección de los magistrados, porque teme que al romper su pacto con GANA se quedaría sin gobernabilidad para terminar su mandato sin grandes crisis. Y por otra parte, ARENA todavía no está dispuesta a asegurar al FMLN esta gobernabilidad. ¿Asegurar cómo? Aprobando junto al Frente un presupuesto 2019 que garantice estabilidad y gobernabilidad al gobierno saliente y al gobierno entrante.

No puedo entender cómo los dos partidos aún no han podido llegar a un acuerdo político tan simple, claro y trascendental. Poner fin a la crisis constitucional sería una muestra del compromiso de ambos partidos con la institucionalidad. Además permitiría al FMLN a salir del dilema: Por una parte dependen de GANA para terminar su mandato gubernamental sin perder la cara; por otra parte GANA, nombrando a Bukele su candidato presidencial, se ha vuelto el principal adversario para el Frente. Porque es obvio que Bukele no solo va detrás de la silla presidencial, sino también detrás de las bases y del rol histórico que ha jugado el Frente, de “representar a los pobres”.

El Frente tiene que entender que para defenderse de esta amenaza no se trata de meterse en una competencia de quién es el más radical y más anti-ARENA, sino de marcar la diferencia sustancial con Bukele y sus hombres: Nosotros vamos a seguir trabajando por más justicia social, pero nunca comprometiendo la institucionalidad y la estabilidad del país. Vamos a defender el sistema pluralista de partidos, que Bukele y sus aliados quieren destruir.

Por otra parte, ARENA tiene que entender el dilema del Frente, y ser muy flexible en sus negociaciones. Si el Frente no puede soltar la rama GANA mientras no tenga otra para agarrarse, ARENA le tiene que proporcionar una rama segura. Es la regla de Tarzán.

Algunos puristas me van a reclamar que estoy mezclando asuntos partidarios y hasta electorales con el nombramiento de los magistrados. Tal vez tengan razón, pero lo que estoy diciendo a ambos partidos es que, a pesar de la competencia electoral, construyan unos entendimientos que les permitan garantizar la estabilidad e institucionalidad del país:

--elegir una Sala de lo Constitucional que defienda la Constitución contra tentaciones populistas;
--elegir un fiscal general que seguirá enfrentando la corrupción, por sin politizar la justicia;
--un presupuesto 2019 que permita gobernar con estabilidad tanto al gobierno saliente como al entrante;
--una propuesta de pacto fiscal que garantice la estabilidad fiscal del país para mediano plazo.

No estoy hablando de un pacto electoral entre los dos partidos. Es un acuerdo de defensa de la institucionalidad y estabilidad, que deja suficientes puntos para pelearse en la campaña electoralsobre cómo crear empleo y seguridad, y cómo mejorar salud y educación…


Solo Arena y el Frente juntos pueden hacer este acuerdo de estabilidad, porque tienen en la Asamblea la mayoría calificada necesaria – y porque tienen en sus filas dirigentes dispuestos a asumir la defensa de nuestro sistema democrático, que nació con ellos mismos firmando el Acuerdo de Paz en 1992. Lo único que ahora falta es voluntad política – en ambos bandos.


Saludos, Paolo

jueves, 25 de octubre de 2018

Carta desde Nueva York

Escribo esta carta desde Nueva York. Para mí, es la ciudad más fascinante del mundo. Al solo llegar, salí del hotel para caminar. Esto es lo que uno hace en Manhattan: caminar, entre miles de personas de todos los colores y todas las lenguas del mundo. Cada cinco o seis cuadras, la ciudad y su arquitectura cambian, los comercios son otros, la mezcla étnica es diferente. Pasé por Korea Town, el Distrito de la Flores; pasé por el Madison Square Garden y Penn Station al barrio de a industria de confección en el West Side, el Times Square, para regresar a Greeley Square, donde se cruzan Broadway y la Avenida de las Américas, y donde está mi hotel.

El día siguiente, antes de entrar en as reuniones que me llevan a Nueva York, hice otro tour, caminando otros barrios: Greenwich Villaje, Soho, Chelsea. Y otra vez terminé en Greeley Park, donde bajo el sol de otoño hay decenas de ventas de comida de todos los sabores del mundo. Un parque con cientos de mesitas, donde los neoyorquinos comen sus almuerzos. Viejos y jóvenes, bien vestidos y homeless, blancos y negros y morenos y amarillos, todos mezclados. Igual mezclados andan en el metro que atraviesa toda la isla de Manhattan con sus diferentes barrios étnicos. En un tramo todos están mezclados, en una estación se levantan buena parte de los blancos, y en otra la mayoría de los latinos, para llegar a Harlem casi solo con afroamericanos…

La ciudad de Nueva York me parece el lugar más diverso del mundo en cuanto a colores, idiomas, creencias, culturas, pero donde menos se sienten tensiones. De alguna manera, me parece el lugar más democrático y tolerante  del mundo. La imagen de división e intolerancia de los Estados Unidos de Trump no se proyecta en las calles de Nueva York. Claro, es la ciudad donde menos han votado por Donald Trump.

Generaciones de inmigrantes han construido esta enorme ciudad: irlandeses e italianos, africanos y caribeños, alemanes y judíos, paquistaníes e hindúes, rusos y chinos, polacos y coreanos, árabes – y salvadoreños.

Todos hablan algún tipo de inglés, aparte de los 200 idiomas de Nueva York. Caminando las calles de Manhattan, uno entiende por qué en todos los rincones del mundo hay gente dispuesta a sacrificar todo para llegar a Nueva York. En esta ciudad que nunca duerme siempre hay trabajo para quienes lo buscan.


Para mí, haber regresado a Nueva York luego de tantos años, es como llegar a casa.


Saludos,

domingo, 21 de octubre de 2018

Bukele no. Cinco razones. Columna Transversal

En enero de 2015, cuando Bukele corrió por la alcaldía de San Salvador, publiqué ocho razones de no votar por él, concluyendo con la frase: “Como son razones de peso, haré todo lo posible para que no gane”.

I
Ganó y hoy, que va por la presidencia, reitero esta frase con aun mayor convicción, porque ahora lo conocemos mucho mejor. Hemos visto cómo administró la alcaldía capitalina, utilizando su gestión para promover a su persona y los colores de su futuro partido. Hemos observado la manera como provocó la ruptura con el FMLN, dándole a su partido solo dos opciones: aceptarlo como candidato presidencial, o expulsarlo.

A un hombre con un ego tan ilimitado nunca le debemos permitir llegar al poder.

II
En tres años ha llevado a la alcaldía capitalina al borde de la quiebra, igual como anteriormente en Nuevo Cuscatlán. Ha hecho buenas obras, pero no dentro de un plan coherente de desarrollo urbano con prioridades definidas, sino dentro de un esquema de impacto publicitario. Viendo sus propuestas en la campaña presidencial, queda claro que hará exactamente lo mismo desde el Gobierno Central. El plan urbano Una Obra por Día se transformó en un plan nacional 20 Obras por Día, siempre con un guion mediático que sustituye un plan de desarrollo nacional. Su proyecto Centro Histórico de San Salvador se convirtió en 50 Centros Históricos Recuperados. Parece que corre por alcalde de todo el país…

Un hombre con tan poca disciplina fiscal no debe ser ejecutor del presupuesto nacional.

III
La manera como ha provocado el conflicto dentro de FMLN y su posterior alianza con GANA demuestran que Bukele no es, como se proyecta, el hombre que supera las ideologías, sino un político que puede adoptar cualquier ideología cuando le conviene, y deshacerse de ella cuando su plan táctico cambia. Para provocar la ruptura con el FMLN y llevarse buena parte de sus bases, se vistió de heredero de los ideales del Frente histórico traicionados por un partido que, según él, se hizo copia de ARENA. Luego declaró que había plena coincidencia con el ideario socialdemócrata del CD, para al fin afiliarse a GANA, que representa la derecha rancia de Tony Saca.

Un hombre tan impredecible, oportunista y carente de principios no puede construir la estabilidad que necesita nuestro país. Está invitando a los salvadoreños, que con buenas razones están frustrados con la política, a una aventura sin rumbo ni plan coherente.

IV
Bukele se proyecta como el líder que va a superar la polarización. Pero es el político más polarizante de la posguerra. La polarización tradicional entre derecha e izquierda por lo menos tiene un marco de referencias que da cierta racionalidad. En cambio, Bukele polariza con todos: con el FMLN, con ARENA, con el sistema de partidos, con la oligarquía, con los medios de comunicación, con el sistema en general. Para él, la polarización y la permanente agresión verbal son el método para autopromoverse y para explotar los resentimientos en una sociedad expuesta a mucha violencia e incertidumbre.

Un hombre con un carácter tan destructivo no puede ejercer un liderazgo positivo y unificador.

V
Bukele se proyecta como nueva forma de pensar y hacer política, como alternativa a los mismos de siempre, los corruptos. Pero está rodeándose, desde el inicio de su carrera política hace seis años, con los mismos operadores políticos y propagandísticos de Tony Saca: Walter Araujo (exdirigente de ARENA), Peter Dumas (íntimo amigo de Saca), Porfirio Chicas (operador de inteligencia de René Figueroa), Ernesto “el Brozo” Sanabria (operador de guerra sicológica de Saca), Alejandro Muyshondt (desestabilizador de Saca), Merlin Barrera (quien hizo el plan de gobierno 2014 para Tony Saca y ahora lo hace para Bukele), Félix Ulloa y Giovanni Galeas (que se unieron a la segunda campaña electoral de Saca) –y ahora además con Herbert Saca, Andrés Rovira y Guillermo Gallegos (que fundaron GANA por órdenes y con fondos de Tony Saca, cuando este fue expulsado por ARENA).

Hay tres candidatos que nadie los ha podido vincular a casos de corrupción. Y uno que por propia decisión se rodea de corruptos y corruptores, y que además está siendo señalado de haber cometido un fraude de ley para evadir impuestos sobre 1 millón de dólares. Esta suma le pagó una empresa familiar de dividendos escondidos, generados por contratos de publicidad con el gobierno, cuando esta empresa no debería haber sido contratada mientras Bukele fue funcionario público. Tiene que arreglar cuentas con Hacienda sobre este monto no declarado, antes de que pueda ser inscrito como candidato.

Cualquiera de los otros tres candidatos presidenciales (Hugo Martínez, Carlos Calleja y Josué Alvarado) tienen más posibilidades de renovar la política que el candidato de GANA. Ellos plantean reformas, no rupturas. Sus propuestas no son tan dramáticas y espectaculares como las de Bukele, pero son más viables y toman en cuenta los obstáculos y la pluralidad. Para mi gusto, podrían ser menos conservadores, me gustan los líderes audaces, pero la verdad es que entre los tres ofrecen opciones para el amplio espectro de nuestra sociedad: izquierda, derecha, centro. Bukele, en cambio, ofrece mucho espectáculo, pero significa incertidumbre, inestabilidad y caprichos.

Los salvadoreños, tan defraudados que se sienten por la política, no necesitan antipolítica. Necesitan política racional y confiable.

sábado, 20 de octubre de 2018

Carta a los migrantes hondureños: ¡Bienvenidos!

Estimados vecinos:
Cuando vi los videos de sus marchas, atravesando a pie Guatemala y El Salvador para llegar a Estados Unidos, tuve que pensar en el éxodo de cientos de miles de venezolanos para Colombia y Brasil.

Me recordé también de las tortuosas marchas nocturnas de centenares de familias campesinas de Morazán, que vi atravesando montes y evadiendo patrullas militares para buscar protección en los campos de refugiados en Honduras, durante la guerra salvadoreña de los 80.

También me volvieron a la mente las escenas de miles de familias sirias que en el 2015 atravesaron a pie toda Europa para llegar a Alemania, porque su país se estaba hundiendo en una guerra interna interminable.

Cuando miles de personas dejan todo atrás y arriesgan su vida y la de sus hijos para emprender semejantes marchas, tienen que haber vivido un infierno y llegado a un grado de desesperación que no les permite quedarse en sus hogares.

Cuando eso pasa, los países vecinos tienen la obligación moral de proteger a los migrantes. Por esto, la orden que Donald Trump mandó a los gobiernos de El Salvador, Guatemala, Honduras y México de detener la marcha de ustedes, es inmoral y nadie le debe hacer caso. Sean cuales sean las amenazas de Trump, nuestros gobiernos tienen más compromisos con los centroamericanos desesperados que con un país rico que se niega a cumplir su obligación moral de acoger a familias que tan obviamente necesitan ayuda. Nuestros gobiernos tienen que albergarlas, nutrirlas, curarlas y transportarlas, así como lo hacemos con desplazados internos por catástrofes naturales. Si es necesario, con apoyo de organismos internacionales.

Yo no sé quienes están organizando sus marchas. No me importa. Hay quienes alegan que detrás de ustedes hay un plan político y propagandístico de Daniel Ortega y Manuel Zelaya. Esto es ridículo. Nadie emprende una marcha tan dura e insegura solo porque algún demagogo los engaña. Solo la desesperación genuina da la fuerza para aguantar lo que ustedes están aguantando en su caravana.
El problema es: Aun si logran llegar a la frontera mexicana, y aunque el gobierno mexicano los deje pasar y les de asistencia, ¿qué va a pasar en la frontera de Estados Unidos? Trump ya ordenó militarizar su frontera para que nadie entre. Lo declaró asunto de seguridad nacional, alegando que entre ustedes están infiltrados terroristas islámicos y pandilleros.

Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos deben movilizarse para buscar, junto a todos los gobiernos involucrados, una solución que garantice la vida y la dignidad de ustedes. De todas formas, lo que hoy está pasando en Venezuela y en Honduras, con miles de familias saliendo de países que no pueden asegurarles la sobrevivencia, mañana va a pasar en Nicaragua. Los gobiernos de la región tienen que tener respuestas a esta crisis. El Salvador debe de dar el ejemplo, ofreciendo albergue a los que aceptarían quedarse en nuestro país.


Ustedes que están avanzando por la orilla de nuestras carreteras, jalando bultos y chineando niños, sepan que están bienvenidos en El Salvador. Así como ustedes en Honduras acogieron a miles de familias salvadoreñas que huyeron de la guerra.
 


Saludos,



jueves, 18 de octubre de 2018

Carta sobre la corrupción en la fiscalía: ¿Casos aislados o sistema?

Tenemos casi 100 días sin Sala de lo Constitucional – y ya nos toca comenzar a discutir sobre la elección del próximo fiscal general. Es inevitable, porque el mandato del actual titular termina en enero próximo.

Más nos vale comenzar desde ya a analizar la situación de la fiscalía y determinar qué tipo de liderazgo necesita, porque viendo lo que está pasando en la Asamblea, corremos el peligro que arranquemos el año 2019 sin fiscal – y posiblemente sin Sala…

En medio de esta situación, el actual fiscal general lanzó otro caso espectacular, que revela la corrupción dentro de la misma fiscalía: una red encabezada por el ex general fiscal Luis Martínez, que involucra a ex jefes fiscales de mucho poder – pero según Douglas Meléndez con la posibilidad que también salgan comprometidos actuales funcionarios de su institución.

No estamos hablando de delitos aislados, sino de una corrupción sistemática, tanto para sustraer fondos de la fiscalía, como para pervertir la justicia, vendiendo al mejor postor (funcionarios públicos y empresarios) protección contra investigaciones de la fiscalía y el servicio de manipulación de evidencias.

Si el fiscal logra sustentar estas acusaciones, sería un paso muy positivo y probablemente el logro más importante de su gestión: el inicio de la depuración de la fiscalía.

¿Será suficiente para llegar a la conclusión que Douglas Meléndez merece la reelección? Indudablemente será un elemento a su favor, pero faltan otros que hay que analizar con cabeza fría. Otro elemento a su favor: Independientemente de si estamos satisfechos con el desenlace del caso Tony Saca y con el tortuoso avance de las múltiples acusaciones contra Mauricio Funes, la fiscalía de Meléndez ha logrado algo muy importante: descubrir los mecanismos y el funcionamiento del sistema de la corrupción institucionalizada en Casa Presidencial: las transferencias tramposas, los fondos secretos, reservados y discrecionales, la abundancia de pagos en efectivo, la falta de auditorías… Gracias a esto, ahora sabemos dónde y cómo hay que cerrar los vacíos de control y las válvulas de escape de fondos públicos.

La verdadera depuración no es solo de personas, sino de mecanismos y subterfugios que permiten el abuso. No es suficiente identificar a las manzanas podridas y apartarlas, hace falta erradicar los vacíos de ley y de control y los mecanismos específicos creados para poder robar impunemente. Y este paso, en el caso de la depuración de la fiscalía, todavía no se ha dado.

¿Cómo fue posible que Luis Martínez pudo apropiarse de buena parte de los 15 millones de dólares de los “narcobarriles” – y nadie se dio cuenta? ¿Cómo no hubo ningún mecanismo de control sobre el uso de tarjetas institucionales de crédito? ¿Cómo puede un fiscal general ordenar que se manipulen procedimientos o archiven investigaciones no concluidas – sin que nadie lo cuestione?


Ya sabemos cuáles son las válvulas que hay que cerrar en Casa Presidencial para prevenir futuros robos. Pero en el caso de la Fiscalía General, no. Al próximo fiscal general le toca hacer una reingeniería integral de su institución, para hacerla eficiente y transparente, y para blindarla contra manipulaciones jurídicas, políticas y financieras. Esto tendrá que ser el criterio principal para escoger al próximo fiscal general – incluyendo para la decisión de reelegir o no al actual titular.


Saludos,

martes, 16 de octubre de 2018

Carta a los viejos y nuevos seguidores de monseñor Romero sobre su legado

Voy a hacer el intento de interpretar a monseñor Romero, desde mi entendimiento de la historia y de la ética. No lo puedo hacer desde la fe y la doctrina católica, porque no la profeso. Crecí en la tradición luterana, que no tiene espacio para santos, pero sí para imperativos éticos. Luego me aparté de la Iglesia, pero no de sus imperativos éticos.

La ética, como las leyes, es un sistema de imperativos que pueden entrar en conflictos, lo que nos obliga a definir prioridades y jerarquías entre principios legítimos. Ahí es donde podemos equivocarnos, si no sabemos poner los imperativos éticos correctamente en el contexto de la realidad.
Cuando monseñor Romero habla de justicia, su principal objetivo es que termine la injusticia, la represión, la matanza. Este objetivo está por encima de cualquier otro, incluyendo la aplicación de la ley. Un ejemplo: Para la ética cristiana, es condenable el uso de la violencia armada para obtener el poder político. Sin embargo, monseñor Romero promueve el violento golpe de Estado del 15 de octubre 1979, porque piensa que puede parar la represión.

Esta posición clara de monseñor Romero de priorizar el objetivo de parar la represión, como máxima expresión de la injusticia encima de cualquier otro es el legado que dejó a su país – y que 12 años después de su asesinato hizo posible los Acuerdos de Paz. Al fin el imperativo de la paz se impuso sobre las legítimas demandas de los diferentes actores de la guerra, incluyendo la demanda de justicia por todos los crímenes cometidos; incluyendo también la demanda legítima de cambios en el sistema social del país.

Hoy, cuando al fin hay un consenso nacional de aceptar a monseñor Romero como autoridad ética, simbolizado en su elevación como Santo de la Iglesia Católica, ¿cómo vamos aplicar su legado?

¿Cómo vamos a entender y hacer nuestro su clamor contra la injusticia?

Hay quienes prefieren aplicarlo al pasado, exigiendo que se aplique justicia en los casos pendientes de crímenes cometidos en el contexto de la guerra, comenzando con el asesinato del mismo monseñor Romero. Pero hay que preguntarse: ¿Qué aportaría esto al objetivo de parar las injusticias y el diario derramamiento de sangre del presente? ¿No será que ahondar en los conflictos y las divisiones del pasado nos dificulta buscar soluciones al problema de violencia del presente que requiere de la concurrencia de toda la sociedad?

La única manera lógica y consecuente de aplicar el legado de Óscar Arnulfo Romero será buscar entre todos una solución al problema de la violencia que padece el país – una solución que obviamente no puede ser basada en más represión, que solo genera más violencia, sino en la voluntad de toda la sociedad de comenzar a erradicar la exclusión social. Y si aceptamos la ética y las prioridades de monseñor, solo puede ser una solución que se construya mediante el diálogo y la reinserción pacífica.

Es irónico que los que más reivindican el legado de monseñor Romero son los que de manera más férrea apuestan a una lucha contra la delincuencia con métodos que monseñor ha condenado tan tajante y valientemente. Es obvio que tanto la mano dura de ARENA como la guerra frontal del FMLN no son soluciones que corresponden al imperativo de Romero que el objetivo prioritario es parar la violencia – por encima del clamor, también legítimo, por aplicar la justicia penal a cualquiera que haya violado la ley.


Si no estamos dispuestos a asumir y aplicar este legado de Romero y continuamos priorizando nuestra sed de venganza disfrazada de justicia, de nada nos sirve venerarlo de Santo en las misas y los discursos políticos.


Disculpen que un hombre no religioso se meta en este asunto. Pero para mi, es un asunto de país, no de religión. Saludos,


sábado, 13 de octubre de 2018

Carta a Raúl Mijango: Condenado por mediador

Querido amigo:
Te condenaron a 13 años. Tu pecado: ser mediador. A petición de una empresa extorsionada actuaste de mediador con las pandillas. Quedó establecido en el juicio que lograste que bajara la extorsión de 15 a 6 mil dólares al mes. Lograste que ningún repartidor, motorista o vehículo de la empresa sufriera daños. Pero luego la empresa fue adquirida por el consorcio Alba del FMLN – y los nuevos dueños te denunciaron.

La jueza dio por válidas todas las pruebas presentadas por la Fiscalía, incluyendo lo dicho por varios testigos que solo contaron lo que otros les contaron. El nuevo apoderado de la empresa, que solo contó lo que los anteriores gerentes le contaron. Dos oficiales de la PNC que relataron lo que los antiguos gerentes supuestamente les contaron en 2014, aunque nunca firmaron ninguna declaración. Los mencionados gerentes, que te habían pedido que intercedieras con los pandilleros, no testificaron porque salieron del país y la Fiscalía nunca los contactó. Los dos oficiales policiales nunca hicieron ninguna investigación, solo hicieron sus informes. Estos informes tampoco fueron presentados por la Fiscalía, mucho menos las declaraciones no firmadas por los gerentes.

Pero la jueza admitió todos estos testimonios como válidas. Igual que el cuento del testigo criteriado, quien fue uno de los cabecillas que participó en la extorsión – y no fue acusado, ni en este caso, ni de los varios asesinatos por los cuales fue detenido.

La sentencia que la jueza especializada Tatiana María Morales Artiga dio este viernes obviamente no resistirá la revisión por parte de la cámara. Uno no tiene que ser abogado para darse cuenta que la Fiscalía no tuvo un caso sólido contra Mijango. Es un asunto de sentido común que alguien quien actúa a petición de la víctima; quien logra que el monto de la extorsión se reducía y se eliminara cualquier daño a los empleados de la empresa extorsionada; quien además no recibe ningún beneficio material, no es extorsionista, sino mediador.

El problema es que el Fiscal General se ha propuesto de criminalizar cualquier tipo de mediación que intervenga en el problema de la violencia y las pandillas. Por esto tienen que convertirte en delincuente, para que a nadie se le ocurra meterse donde según la fiscalía solo debe actuar ella y la policía.


A vos, Raúl, te persiguen, porque no aceptás que el problema de la violencia solo se puede combatir con balas y cárcel. Nuestra justicia, si es independiente, no debe criminalizar los intentos genuinos y desinteresados de personas como Mijango de usar el diálogo para reducir la violencia. Yo sigo teniendo confianza que nuestro sistema judicial funciona y al fin te va a absolver de esta acusación absurda. 


Fuerza, amigo. Saludos,

 

jueves, 11 de octubre de 2018

Carta al Frente: Feliz cumpleaños, aunque nadie lo celebra


Estimados compañeros:
Hoy hace 38 años se fundó el Frente. ¿Por qué nadie lo celebra? Veo en las redes sociales un comunicado del FMLN que habla de batallas pasadas y por venir; veo una foto de 10 personeros vestidos de rojo levantando el puño en un cementerio en homenaje a “héroes, heroínas y mártires”…

Esto no es celebrar. Esto no es rescatar la esencia de este día histórico hace 38 años. La esencia no son las batallas ni los muertos, sino la capacidad de construir unidad sobre la diversidad. El Frente que fundaron un 10 de octubre de 1980 resultó tan fuerte por la diversidad y autonomía de sus integrantes.

¿Por qué el FMLN, cuando se convirtió en partido, fue paulatinamente abandonando su carácter plural, sustituyendo la unidad basada en diversidad por una unidad doctrinaria e impuesta?

¿Por qué el FMLN pone en el centro de su historia sus batallas y sus muertos – y no su más grande logro histórico: la construcción de la paz y del pluralismo por la vía del diálogo y la concertación?

Si el FMLN hubiera apostado consecuentemente a este legado en los últimos 20 años, hoy no se vería ante el peligro de ser desplazado por seudo-líderes que profesan una melcocha de ideas antisistema.

Pero nunca es tarde. El Frente, a pesar de los errores cometidos como oposición y sobre todo como gobierno, de hecho nunca dejó de ser parte y pilar de este “sistema”, que ahora está siendo cuestionado y atacado por un nuevo populismo desbordado y demagógico. Hoy es cuando el Frente debe tener el valor de asumirlo. Es el sistema democrático, pluralista y constitucional que nunca hubiera podido establecerse en El Salvador sin el Frente.

Claro, para que el Frente asuma sin ambigüedades y con credibilidad esta defensa, sería necesario una revisión autocrítica de su actuación como parte de este sistema, primero como signatarios de los Acuerdos de Paz, luego como oposición política y finalmente como gobierno. Muchos en el partido entienden que ellos mismos promovieron actitudes antisistema y populistas – y que sin esto no hubiera surgido con tanta fuerza el peligro que ahora amenaza con desplazarlos.

Bukele y sus apóstoles atacan al Frente sin misericordia, precisamente por que es parte del sistema de la postguerra. El Frente tiene dos opciones: o asume con orgullo y decisión la defensa y la reforma de este sistema que, por muy imperfecto que sea en cuanto a inclusión social, ha dado al país libertad de expresión, desmilitarización, pluralismo, alternancia en el poder, institucionalidad. O competir con Bukele en el campo de la antipolítica y la erosión del sistema republicano. Tengo entendido que lanzando a Hugo Martínez como candidato, el Frente ha optado por lo primero – solo falta un paso decisivo: asumirlo sin ambigüedad.

Para evitar cualquier malentendido: Mucho de lo dicho en esta carta hay que reclamarlo también a ARENA, que también debería asumir con orgullo como su logro histórico no la lucha férrea contra la izquierda, sino su decisión y capacidad de abrir el sistema cerrado del autoritarismo para crear un sociedad abierta y pluralista con plena inclusión de la izquierda. Todavía hay muchos en ARENA y sus liderazgos que siguen buscando el derrumbe del FMLN, sin darse cuenta que se estaría derrumbando uno de los pilares del sistema democrático y pluralista.


Ambos partidos tienen que entender que son competidores y adversarios, que representan dos visiones de cómo reformar el sistema, pero que los enemigos que ponen en peligro lo logrado y lo que falta hacer son otros.



Saludos los miles de excombatientes del Frente,

martes, 9 de octubre de 2018

Carta a los que exigen una CICIES: Cuidado con el fraude de etiqueta

Estimados amigos:
Arrancando con su campaña presidencial, Bukele se apropia de una bandera que en El Salvador ya cambió varias veces de portadores: la CICIES – una Comisión Internacional contra la Impunidad y Corrupción.

Antes de que se alegren, los movimientos sociales que durante años hablaron de una CICIES, deben analizar si esta propuesta de Bukele realmente es lo mismo que ellos pidieron – o si es un fraude de etiqueta…
Su órgano oficial “Última Hora” reporta lo que Bukele anunció en su meeting en La Unión: El candidato presidencial, Nayib Bukele, confirmó que su compañero de fórmula, Félix Ulloa, será el responsable de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en El Salvador (CICIES), propuesta que tiene como finalidad combatir la corrupción en El Salvador.”

Y Ulloa inmediatamente lo confirmó en su Twitter: “Gracias a mi compañero de fórmula Nayib Bukele por nombrarme como responsable de la CICIES con que combatiremos la corrupción y el clientelismo político.”



¿Esto es lo que durante años muchos sectores de la sociedad civil exigieron? Obviamente no. Exigieron que en El Salvador se instale una comisión como la CICIG de Guatemala, que estaba al punto de meter preso a la vicepresidente y al presidente de la República. Siempre se estaba hablando de una comisión internacional, que por definición tiene que ser no partidaria y absolutamente independiente del gobierno.

¿Una CICIES bajo responsabilidad del vicepresidente? Es una idea aun más descabellada que la del presidente guatemalteco Jimmy Morales, quien expulsó al jefe de la CICIG y exige a Naciones Unidas nombrar a un sustituto que tenga el beneplácito del gobierno.

La idea de Bukele tiene historia en El Salvador. Mauricio Funes propuso una CICIES en 2011, pero rápido abandonó esta idea, al ver que en Guatemala esta comisión internacional comenzó a convertirse en una amenaza real para la impunidad de los gobernantes. Desde entonces, tanto Funes como el FMLN y GANA se oponen con vehemencia una “intervención en la soberanía nacional”…

Parece irónico que hoy es el candidato de GANA, Nayib Bukele, quien quiere navegar en su campaña presidencial con la bandera de una CICIES. Solo se puede entender como un truco propagandístico, un empaque engañoso sin contendido real. Esto se llama fraude de etiqueta. La etiqueta promete una cosa novedosa y audaz, el contendido es lo mismo de siempre: Control gubernamental sobre algo que solo puede funcionar si es independiente.

Si realmente quisiera combatir la impunidad y la corrupción, no estuviera atacando la independencia de la Fiscalía General. Cada vez que la FGR comienza investigaciones que podrían afectar a Bukele, denuncia que la fiscalía es parte de un esquema para bloquear su ascenso al poder. Si su partido GANA estaría interesado en combatir la corrupción, no estuviera bloqueando la elección de magistrados independientes que podrían revivir el trabajo de la Sección Probidad.

Lo peor que podría pasar al país es una CICIES como instrumento del Ejecutivo para debilitar las instituciones que controlan la actuación de los funcionarios. Comisiones de este tipo solo tienen sentido si fortalecen la independencia de la Fiscalía, de Probidad, de la Corte de Cuentas.

Bukele, Ulloa y GANA obviamente saben que la Sociedad Civil y la Asamblea nunca van a aprobar una CICIES que no sea independiente del Ejecutivo. Conclusión: No es un propuesta seria, es propagandística, tratando de apropiarse de una causa ciudadana – no sin antes pervertirla. De manera más perversa no pueden expresar su desprecio a los movimientos ciudadanos… 


Saludos,


sábado, 6 de octubre de 2018

Carta a los candidatos: Pónganse serios

Estimados candidatos presidenciales:
El candidato de Gana, Nayib Bukele, hizo una propuesta a sus competidores: Propongo que los 4 candidatos presidenciales nos reunamos y consensuemos una propuesta de Sala de lo Constitucional para los diputados de la Asamblea. Si bien es atribución única de los diputados, estoy seguro que una propuesta de consenso de nosotros 4 desentramparía la elección.”

Tal vez suena bonito a algunos, pero no es una propuesta seria. Es una movida demagógica – y peligrosa, porque implica llevar el asunto de la elección de los magistrados, ya jodido por su indebida politización, al plano electorero. Por suerte, nadie le hizo caso.

¿Por qué es demagógica esta propuesta? Primero, porque gestiones de este tipo, si realmente la intención es remover obstáculos, no se hacen como reto en Twitter. Resolver una crisis institucional requiere de construir confianza – y es lo que menos hacen GANA y su candidato. Segundo, cada candidato primero tiene que poner orden en su propia casa, antes de buscar mecanismos extra-institucionales que, mal hechos, pueden profundizar la crisis en vez de resolverla. O sea, cada candidato, si quiere aportar a una solución, tiene que hacer valer su influencia en su propio partido y sus diputados. Y al ser necesario, golpear la mesa, pero la mesa en su casa, no en Twitter.

El único que ha hecho esto fue Carlos Calleja, con el resultado que las bancadas de su alianza electoral han consensuado una propuesta sólida, basada en la idoneidad de los candidatos a magistrados. Esta propuesta es perfectamente aceptable para todos que están dispuestos de despojarse del afán de regresar al esquema de cuotas partidarias – y de toda intención de bloquear la elección de la Sala.

¿Cuál sería la conveniencia de no tener Sala? Algunos en el FMLN creen que les conviene que no exista Sala de lo Constitucional que pueda ejercer control de la constitucionalidad de leyes y de las actuaciones del Ejecutivo. Para otros, en GANA y Nuevas Ideas, porque les conviene que el país viva una crisis institucional, porque les ayuda mostrar que el sistema partidario no sirve – y que se necesita a un líder que moviliza “al pueblo” a transformarlo.

El candidato del FMLN debería asumir liderazgo y convencer a su partido que no puede ser su interés seguir bloqueando la elección de los magistrados y alargar la crisis institucional – y que hay otras formas, más civilizadas, de asegurar al gobierno del FMLN la gobernabilidad que necesita para terminar su mandato sin fiasco.

Bukele y GANA deben pensar en serio si quieren seguir jugando con el fuego de una crisis artificialmente alargada. Se pueden quemar las manos. La granada que quieren tirar a lo que llaman “el sistema de los mismos de siempre” puede explotarles en la mano – electoralmente hablando.

Calleja debe asegurar que la unidad alcanzada dentro de su alianza no se rompa por bayuncadas como la última de Rodolfo Parker, cuando propuso mecanismos inconstitucionales (traslado de magistrados, elección parcial de la Sala). Y además, para desbloquear la situación, debe animar a sus partidos que se abran a una concertación con el Frente que genere gobernabilidad – tanto para el gobierno saliente como para el entrante. Mientras el FMLN ve en la alianza legislativa con GANA la única manera de terminar su gobierno sin perder la cara, va a apoyar a GANA en su afán de bloquear la constitución de la próxima Sala.


Si los candidatos presidenciales quieren aportar a resolver esta crisis, que cada uno haga su tarea – en su casa.
 


Saludos,

jueves, 4 de octubre de 2018

Carta a los aprendices de censores: Aquí hay libertad de expresión

Diputados y burócratas:
La libertad de expresión es el corazón de la democracia. Su gemela es el derecho del ciudadano de tener acceso libre a las noticias, opiniones, obras de arte, películas, diversiones y cualquier otra expresión cultural que quiere. Libre de control estatal.

Para conquistar esta libertad se libró una guerra. Ambos bandos tuvieron la libertad de expresión en sus banderas. Unos la vieron pisoteada por un Estado autoritario, otros la vieron amenazada por un movimiento insurgente, al cual vieron intenciones totalitarias. Al fin todos nos pusimos de acuerdo en construir un Estado democrático que garantice la libertad de expresión y sin espacio para censura.

Parece que no todos comparten este consenso fundamental. Dentro de una sola semana hubo tres intentos de volver a establecer censura en nuestro país. Un diputado de ARENA presentó un “dictamen recomendable” para exigir al gobierno que prohíba el concierto de una banda de heavy metal. Bueno, siempre hay algunos fanáticos que están dispuestos a sacrificar la libertad de expresión para imponer sus gustos o disgustos. Lo grave no es un diputado desequilibrado, sino el hecho que esta noción encontró una mayoría de 48 votos en la Asamblea.

Días después, el ministro de Gobernación y varios diputados del Frente presentaron una iniciativa de ley para “regular” y “normar” los contenidos de los medios de comunicación, incluyendo canales de cable y servicios como Netflix. No lo llaman así, pero es censura – y censura está explícitamente prohibida en nuestra Constitución. Es el mismo ministerio de Gobernación que diariamente coloca rótulos en las pantallas de televisión que advierten que los programas de entrevistas y debates no son aptos para menores de 18 años. O sea, el que mañana debe votar, hoy no debe ver a los candidatos en entrevistas. ¿Qué mentalidad hay detrás de estos burócratas censores?

El mismo día, un funcionario de aduanas se arrogó la potestad de no dejar entrar al país un lote de un libro llamado “El Niño de Hollywood”, que cuenta la historia de un pandillero, quien luego de servir como testigo criteriado, es abandonado por el Estado y asesinado. El argumento del funcionario: “Contenido pernicioso”.

¿Vamos a permitir que el Estado -sean diputados, sea un ministro, sea un funcionario de aduana- decida qué libros, conciertos o películas podemos consumir? Obviamente, no.

Todos nos topamos con películas, noticieros, libros o discos que detestamos. Pero todos somos diferentes y preferimos o rechazamos cosas distintas. Este dilema comienza en la familia. La única forma de resolverlo es con tolerancia – y con la regla que nadie tiene el derecho de imponer sus gustos o disgustos a los demás. Ciertamente no el Estado. Esto establece la Constitución, y aplicándola, ninguna de las tres iniciativas de censura arriba mencionadas tiene validez. El “recomendable” del diputado armado, aprobado por 48 diputados, choca con la Constitución, igual que la iniciativa de una nueva Ley de Mordaza del ministro de Gobernación – y la censura ejercida por un funcionario de aduana constituye el delito de acto arbitrario.

Cualquiera tiene derecho de criticar los contenidos de libros, películas y conciertos, en los términos duros que quiere – este es otro derecho ciudadano protegido por la libertad de expresión. Pero el Estado, en todas sus expresiones, tiene que ser neutral en estos asuntos, porque es de todos, incluyendo de los consumidores de conciertos o libros polémicos.



Los intolerantes de todos los colores siempre van a pedir censura, motivados por fanatismo religioso o estrechez ideológica, o simplemente por ínfulas de poder y control. Y si no nos cuidamos, van a actuar de censores. Depende de nosotros pararles sus pretensiones autoritarias.



Saludos,

martes, 2 de octubre de 2018

Carta a los votantes: Un test de carácter

Estimados ciudadanos:
Mañana suena el tiro de salida para la carrera por la presidencia. Ya pasamos meses pendientes de los candidatos, sus fotos, sus entrevistas, sus consignas – pero lo que ahora viene son 4 meses de propaganda masiva, de giras, de debates, de encuestas, de propuestas y contrapropuestas y críticas a las propuestas, de decenas de miles de activistas movilizándose en plazas, barrios y redes sociales, incluyendo miles de troles con sus mentiras e insultos…

Es una carrera de maratón.
Ganará el candidato con mejor estrategia, mayor consistencia, mejor economía de esfuerzos – y quien al mismo tiempo presente las mejores propuestas de la manera más clara, audaz y creíble.

No necesariamente ganará el que puede movilizar más dinero
, saturar los medios con spots y cancioncitas. Como el maratón, en el fondo es una prueba de carácter.

No vamos a premiar al más elocuente. Con Saca y Funes tuvimos dos presidentes extremadamente elocuentes, y miren cómo nos fue con ellos. Más que labio exigimos credibilidad y coherencia. A los que hagan las promesas más impactantes, los vamos a observar con más desconfianza. A los que con más habilidad apelen a nuestras emociones, nuestros resentimientos, miedos o sueños, los vamos a analizar bajo la lupa para ver si detrás de la oratoria y propaganda existe racionalidad.

Los ciudadanos vamos a fijarnos más en los tonos suaves y los argumentos que en los grandes gestos. No todos, siempre habrá los que ciegamente aplaudirán a quienes ya asumieron como sus favoritos, líderes, salvadores o redentores. Pero la ciudadanía, en su mayoría, luego de tantos engaños, ahora es más crítica, más escéptica, más exigente, más independiente – más libre. Ojalá que los candidatos lo entiendan y sepan hablar a esta mayoría.

Quienes piensan que todo ya está decidido, se autoengañan – y nos quieren engañar.
En estos cuatro largos meses de campaña cualquier cosa puede pasar. El Frente puede recuperarse, Vamos puede conectar con muchos de los indecisos, y los dos “favoritos”, Bukele y Calleja, pueden cometer errores fatales – o consolidar su posición con muestras de liderazgo.

De nosotros, los ciudadanos críticos, depende de que el país no se equivoque nuevamente. El Salvador no aguanta otro gobierno ineficiente, incapaz y que no tenga el valor de definir correctamente sus prioridades. Por esto, mi única recomendación a los votantes es: Desconfíen de los que en esta campaña traten de decir lo que se imaginan que ustedes quieren escuchar. Fíjense en quienes tienen el valor de decir verdades, aunque nos puedan doler y nos exijan sacrificios.


Repito: En el fondo esta carrera presidencial es una prueba de carácter. Pero no solo del carácter de cada uno de los candidatos, también del carácter de cada uno de nosotros. Si nosotros, los ciudadanos, pasamos este test de carácter, nuestro país tendrá futuro. Si no, nos van a seguir engañando y frustrando.

Saludos,