"¿Habrá Bukele realmente pensado que Trump no iba a detectar la trampa en la ‘generosa oferta’? Dar bullshit a un bullshiter mayor no es tan fácil...
Así la historia de la otra mina de oro que quiere explotar Bukele: convertir en negocio hasta el lado más oscuro de su país, sus cárceles - y la ausencia de un Estado de Derecho."
Publicado en MAS! y DIARIO DE HOY, jueves 6 febrero 2025
Para competir en el mundo, un país tiene que definir cuáles son sus mejores cualidades y capacidades y cuáles son los servicios que nadie más puede ofrecer. Bueno, lo que el gobierno salvadoreño mejor sabe hacer es manejar cárceles. Ya tiene casi el 2% de su población detrás de las rejas – y todo tranquilo, todo bajo control...
Partiendo de esto, parece lógico el negocio que Nayib Bukele ha ofrecido a Trump. Así la oferta generosa: “Tienes las cárceles llenas y ahora se suman decenas de miles de migrantes que van a detener para deportarlos. Te sale muy caro tener tanta gente encarcelada. Sobre todo porque las leyes de tu país te obligan a garantizar a los presos condiciones dignas, atención médica, tres tiempos de comida, etc. Yo no tengo estos problemas. Así que te puedo resolver esto mucho más barato. No hay leyes que me hacen estorbo, y si las hay, nadie me obliga a cumplirlas. Tengo las cárceles más seguras. Por un costo, que para ustedes es ridículo, puedo hacerme cargo no solo de los migrantes deportados, sino de cualquier criminal, sea extranjero o estadounidense.”
El jefe del State Department, Marco Rubio, no podía creer cuando Bukele le hizo esta oferta de negocio. Le iba a pedir que el gobierno salvadoreño se preste para recibir un par de miles de migrantes de diferentes partes, que no sabían como deportarlos a su países de origen. Este deal incluiría a migrantes que habían cometido delitos, incluso a pandilleros venezolanos y haitianos. Pero Bukele no quería entrar en discusiones sobre política de migración, ni mucho menos de Derechos Humanos. De un solo habló de negocios, sabiendo que es el lenguaje que entiende Donald Trump: Un deal.
¿Qué era lo que Bukele esperaba de Estados Unidos en este deal? Podría haber exigido que Trump mantenga válido el TPS para 180 mil salvadoreños. Podría haber exigido que dejen a los compatriotas afuera de las deportaciones masivas. Nada de esto. Lo único que pide es que le manden de regreso a los líderes de la MS 13 detenidos en Estados Unidos. O sea, que se suspendan las investigaciones de la justicia estadounidense contra ellos, antes de que salgan a la luz los detalles sobre el pacto que con ellos había negociado el gobierno de Bukele.
Esta exigencia es una bofetada a la justicia de Estados Unidos, que durante año ha exigido que El Salvador extradite a una docena de líderes de la MS, que tienen juicios pendientes en Estados Unidos. Bukele siempre se negó a estas extradiciones – y ahora quiere invertir la cosa y pide que extraditen a El Salvador a los jefes pandilleros que ya están formalmente acusados en las cortes de Estados Unidos.
A Nayib Bukele no le preocupan estas complicaciones legales. Ha sabido superarlas en su país – y obviamente piensa que Trump va en la misma dirección.
Porque su gran idea de Servicios Carcelarios Internacionales SA de CV encontrará en Estados Unidos cualquier tipo de desafíos legales. A Nayib Bukele le podría parecer normal la idea de que en un país como Estados Unidos los tribunales permitan que personas bajo custodia del Estado cumplan se condena en un país en permanente estado de excepción y sin Estado de Derecho; en un sistema penitenciario administrado por un funcionario -Osiris Luna Mesa- sancionado por Estados Unidos; y en prisiones denunciados como centros de tortura.
Mandar a sus reos, aunque sean extranjeros, a este tipo de cárceles sería imposible para las cortes estadounidenses. Ni hablar de la idea de Bukele de recibir incluso a ciudadanos de Estados Unidos condenados de cualquier delito.
Así que, Marco Rubio se fue del Lago de Coatepeque, impresionado de los espectaculares atardeceres y de la generosa oferta de Bukele. Al fin existe un aliado realmente confiable en la región, pensó. Pero ya el día siguiente, su jefe en la Casa Blanca lo obligó a regresar a la realidad: Trump había declarado que la oferta de Bukele era interesante, pero podría enfrentar problemas legales en Estados Unidos. Así que Rubio, ya estando en Costa Rica, comenzó a bajar las expectativas sobre el deal ofrecido por Bukele.
“To good to be true”, habrá pensado Donald Trump, cuando se enteró de la oferta de Bukele. Este hombre, igualmente dado a dispararse con propuestas irreales (como la más reciente de evacuar a toda la población de Gaza y mandarla a países vecinos, para que Estados Unidos tome posesión de esta franja atractiva de real estate y la convierta en ‘la Riviera de Medio Oriente’...), sabe cuando otro le quiere dar paja – y lo pone en su lugar.
¿Habrá Bukele realmente pensado que Trump no iba a detectar la trampa en la ‘generosa oferta’? Dar bullshit a un bullshiter mayor no es tan fácil...
Así la historia de la otra mina de oro que quiere explotar Bukele: convertir en negocio hasta el lado más oscuro de su país, sus cárceles - y la ausencia de un Estado de Derecho.
Saludos,