sábado, 29 de junio de 2013

Carta a Edwin Zamora

Querido amigo:
Ya alguien se me adelantó y puso a circular en las redes sociales una supuesta carta mía sobre el pleito entre vos y Neto Muyshondt, titulada “Carta a la lacra más grande de ARENA”. Me enorgullece que ya me están tratando de imitar mis cartas. Hasta cursos de Photoshop han tomado los de la fabrica de basura llamada “quienessonsv”. Porque en comparación con su anterior obra de arte, el famoso cheque de ARENA, han hecho avances, falsificando esta vez una pagina de mi blog.

Y redactaron bastante bien la supuesta carta mía a Neto. Algunos amigos comunes nuestros, Edwin, hasta me felicitaron. Siento mucho tener que defraudarles, pero yo no entre en campañas negras. Está bien grabar conversaciones privadas para denunciar delitos – pero siempre poniendo uno la cara, nunca para atacar desde el anonimato, como lo hacen estas quintas columnas de la campaña electoral de un candidato que se jacta del fair play y de nunca insultar a sus adversarios. Debajo de la mesa limpia sus encargados de campaña negra crean perfiles anónimos y falsas y las usan para atacar de la manera más cobarde y perversa...

En un pleito que surgió de esta manera, con grabaciones ilegales y difusión desde el anonimato, no tengo nada que decir. La única cosa que te puedo comentar, Edwin, es que hubiera preferido escucharte decir estas tus críticas con la frente en alto, en público. Si debatimos de manera franca y abierta, no importa el contendido crítico. Y no importa que nos graben cualquier llamada telefónica o conversación privada. ¡¿Y qué?! Si estamos diciendo lo mismo en privado que en público...

Todos quienes te conocemos y somos amigos tuyos sabemos de tu posición crítica a la manera cómo el partido ARENA recompone, sin transparencia, sus liderazgos, en el Coena como en la fracción y los sectores. Nos hubiera encantado escucharte expresar estas críticas en público, con el mismo rigor que te caracteriza en reuniones privadas o pláticas de confianza. Te hubiera causado problemas en el partido, seguramente, pero a la larga te lo hubieran agradecido. Si hay una cosa que necesitan los partidos en este país, ¡todos!, es debate crítico.

Así que ahora que te agarraron en curva, grabando y difundiendo una conversación privada, lo peor que puedes hacer es esconderte o callarte. Ya pagaste el costo, así que aprovechá la oportunidad para exponer de manera sistemática y sincera todas las críticas que tenés a cómo se conduce tu partido, cómo se maneja la fracción legislativa, y cómo apesta el trabajo en la Asamblea...

Nunca es tarde para la verdad, para la crítica, para provocar un cambio. No te ahuevés, Edwin. Al fin el hecho que te “descubrieron” puede ser el punto de inflexión hacía un debate crítico. Puede ser que, muy a pesar de las intenciones perversas de los que te grabaron y expusieron, al fin salga fortalecido el partido que ellos quieren destruir.
Bienvenido a la línea de fuego, querido Edwin. Admiro tu actitud conciliadora, aunque no la comparto. Y al fin, ella no te protegió del shit storm que desaten tus adversarios. 

Saludos, Paolo
(Más!/EDH)

jueves, 27 de junio de 2013

Carta a Norman Quijano, Óscar Ortiz y Salvador Sánchez Cerén

Estimados candidatos:
La decencia les demanda que se separen de sus cargos como funcionarios públicos. Ya están en plena campaña: No pueden seguir aprovechándose de sus cargos estatales y de los respectivos presupuestos.
Si no pueden ser decentes, por lo menos sean prudentes: Por cada voto que aspiran ganar haciendo uso de los fondos públicos para su proyección como candidatos, estén seguros que perderán dos votos - la gente se comienza a encachimbar. Al final, el más vivo va perdiendo.

Norman y Óscar, los alcaldes de San Salvador y Santa Tecla, ustedes hubieran tenido que renunciar en el momento que se lanzaron de candidatos. Y el vicepresidente de la República, que no puede renunciar a su cargo, debería haber dejado de hacer viajes y de andar arriba y abajo inaugurando obras gubernamentales...

Lastimosamente nuestras leyes no regulan estos casos con claridad. Pero sí prohíben claramente el uso de fondos públicos para campañas partidarias.

Para mi criterio, la Constitución no debería permitir la candidatura presidencial de un vicepresidente. Por la simple razón que es un funcionario que no puede renunciar a su cargo. La Constitución obliga a los ministros, si quieren competir por la presidencia, renunciar un año antes del cambio de gobierno. ¿Por qué no exigimos lo mismo a un alcalde? ¿Y por qué toleramos que un vicepresidente goza de todos los privilegios de su cargo mientras se dedique a su campaña proselitista? Es patético cómo usted, profesor, cambia camisas: en la mañana la de la vicepresidencia para inaugurar un puente o una escuela; a mediodía la de ALBA para inaugurar una gasolinera; y en la tarde la del FMLN para presidir un meeting partidario.

Bueno, pero hay otras leyes. No son de la República, sino de la decencia y del sentido común. Estas leyes no las puede hacer cumplir un tribunal, pero sí el ciudadano votante.

No tenemos porqué tolerar que Salvador Sánchez Cerén siga usando los privilegios y recursos de la vicepresidencia. Podemos exigir a Norman Quijano y Óscar Ortiz que de inmediato depongan sus cargos de alcalde y que dejen de usar los presupuestos de sus municipios para su proyección como candidatos. Los dos partidos grandes no deberían ponerse a la altura (más bien, bajeza) de la otra candidatura que, de todos modos, haga lo que haga y diga lo que diga, es percibida por la gente como contraria a la decencia.
 

Saludos, Paolo Lüers
(Más!/EDH)

martes, 25 de junio de 2013

Carta a los equipos de planes de gobierno de las 3 candidaturas presidenciales

Estimados señores:
Ustedes dicen que quieren recibir propuestas de los ciudadanos para convertirlas en programas de gobierno. Espero que sus mesas de consulta no sean mesas falsas y que sus programas no sean producidas para engavetarlos. Les doy el beneficio de la duda. Les mando
algunos puntos que llamaría lo mínimo que hay que exigir al próximo gobierno para restablecer el funcionamiento del gobierno:


  • Volver a establecer el funcionamiento permanente del  Consejo de Ministros.
  • Reducir al mínimo necesario el aparato de Casa Presidencial, donde Funes ha instalado un gobierno paralelo.
  • Convertir las secretarías de Inclusión Social y de Cultura de dependencias de la presidencia en ministerios.
  • No crear ninguna secretaria al cargo de la primera dama.
  • Convertir la Secretaría de Asuntos Estratégicos en una oficina de asesores de la presidencia - sin competencias ejecutiva, pero con alto standard académico.
  • Reducir la Secretaría de Comunicación a una oficina de prensa de presidencia.
  • Crear una institución autónoma que maneje los medios de comunicación públicos, con un estatus de autonomía parecido a la Universidad de ES.
  • Redefinir la misión de la sub-secretaría de Transparencia, una vez que el Instituto de Acceso a la Información esté funcionando plenamente.
  • Suspender la publicación de órganos de propaganda por parte de las secretarías de la presidencia.
  • Redefinir el cargo del Secretario Técnico y convertirlo en el ministro de la presidencia al cargo de coordinar el Consejo de Ministros.
  • Redefinir el cargo del ministro de Economía y convertirlo en coordinador del gabinete económico.
  • Establecer reglas claras para el manejo de escoltas de seguridad y caravanas para el presidente y su familia. Definir criterios de necesidad documentada, no de status social, para los dispositivos de seguridad de funcionarios.
  • Establecer un reglamento claro y transparente para la publicidad de Casa Presidencial y otras dependencias del ejecutivo. Regla básica: Solo se permite publicidad informativa que corresponde a una necesidad informativa de la población, no a una necesidad de proyección del gobierno. Se suprime toda publicidad de carácter propagandística para mejorar la imagen de las instituciones y sus funcionarios, incluyendo al presidente.
  • La misma regla se aplica al uso de cadenas nacionales. Tiene que corresponder a una necesidad de información de la población, no a una necesidad de proyección política del gobernante.
  • Transparentar el presupuesto de la presidencia, incluyendo los gastos de la familia del presidente, publicidad, asesores, viajes.
  • Hacer verdad la autonomía de las autónomas como CEL, CEPA, ISSS. Que sus presidentes respondan a sus juntas directivas y no a Casa Presidencial. Reformar y hacer más plurales y representativas estas juntas directivas para consolidar la autonomía. Hay que romper con la regla que cada presidente nombre presidentes de las autónomas.
Saludos a sus respectivos candidatos, Paolo Lüers
(Más!/EDH)

sábado, 22 de junio de 2013

Tercera carta de Oslo

Cuando ustedes lean esto, ya estaré de regreso en El Salvador. Cansado, luego de este viaje relámpago a participar, a invitación del gobierno de Noruega, en el Oslo Forum 2013 sobre la búsqueda de soluciones a conflictos violentos. Dos días largos de exposiciones, debates, controversias, reflexiones, intercambios con expertos de todo el mundo.

Habían invitado al embajador Adam Blackwell, de la Organización de Estados Americanos; al analista norteamericano Steven Dudley, de ‘Insight Crime’; y a mi, en mi calidad de miembro del Comité Técnico de Coordinación del Proceso de Reducción de la Violencia en El Salvador, para conocer y discutir el caso de El Salvador, donde una extraña tregua entre pandillas abrió la oportunidad histórica para construir un proceso de paz.
Bueno, esto es lo que yo les conté... La primera pregunta que tuve que enfrentar fue: Aquí en Oslo estamos discutiendo guerras internas, insurrecciones, conflictos bélicos de origen religioso, étnico o ideológico... ¿que tiene que ver con esto un problema de seguridad pública como sus pandillas criminales?
La mejor respuesta la dio una reconocida experta en justicia internacional: “Si en un país de 6 millones se mueren 4 mil personas cada año por homicidio, este país tiene un conflicto violento. Y si por intervención de mediadores, los principales generadores de esta violencia letal deciden desarmar esta escalada de violencia-represión-más violencia y logran durante 15 meses reducir la cantidad de asesinatos a la mitad, este país tiene un proceso de paz en pleno desarrollo. Bienvenidos a Oslo.”
Enfrentamos en Oslo las mismas dudas que existen en la sociedad salvadoreña. Pero también el mismo entusiasmo que se provoca cuando las personas se despojan de sus prejuicios y resentimientos y comienzan a ver el potencial de este proceso.
Me encontré a un padre jesuita que acaba de tener que huir de su país en plena guerra civil. La primera noche me declaró loco - con los mismos argumentos que en El Salvador me encuentro todos los días: “¿Cómo se atreven a dialogar con criminales, que no tienen ni siquiera una razón religiosa o política para matar?” Le dije: “¿Y tú prefieres que te maten acompañado de sermón sectario?” Se armó en ira y se fue...
Luego de nuestro Foro sobre la tregua de pandillas, retomamos la plática, y el padre me dijo: “Quisiera cambiar a los fanáticos religiosos e ideológicos, que todo el mundo reconoce como fuerza beligerante y hace cola para negociar con ellos, con tus pandilleros salvadoreños que matan sin causa y comienzan a entenderlo.”
Este mismo padre me contó que en Semana Santa del año 1980 visitó Roma. Quería alertar al papa de una masacre de 30 mil civiles cometida en su país. Nadie lo recibió. Nadie le hizo caso. Pero se encontró con tres mujeres salvadoreñas que andaban igual de desesperadas: querían pedir al papa que hablara en la misa de Semana Santa de monseñor Romero. E igual, Roma no les hizo caso. Terminaron orando juntos, en un monasterio de Roma, por la paz en sus dos países. El padre terminó su cuento diciéndome: “Hoy parece que tenemos un papa que sí hace caso a los que luchamos por la paz. Mando un abrazo a los salvadoreños, y un mensaje: Los que más sufrimos en este mundo de guerras, los que más sabemos apreciar al valor de la paz, estamos con ustedes. Vayan adelante, con paciencia, incluso con los escépticos. Si yo vine aquí escéptico, casi cínico, y ustedes terminaron dándome esperanza que en mi país no se ve.”
Mensaje transmitido. Gracias, padre. Paolo Lüers
(Más!/EDH) 
 

viernes, 21 de junio de 2013

Carta de Oslo (2)

Siria es el gran tema en esta conferencia internacional sobre mediación de conflictos violentos en Oslo, a la cual fui invitado por el gobierno de Noruega. En el podio del debate inaugural: el canciller de Noruega, el mediador oficial para Siria de Naciones Unidas y de la Liga Árabe, y una canadiense que durante años fue fiscal jefe de la Corte Penal Internacional en La Haya. La pregunta que inmediatamente se sitúa en el centro de la discusión: Mediando en Siria, ¿qué sentido tiene? ¿Buscar un entendimiento y un futuro común entre el régimen de Assad y la oposición? ¿O sólo se trata de facilitar la salida de Assad del poder y del país, sin prolongación de la guerra interna, para luego negociar entre todos los demás todos los demás problemas y conflictos? Es obvio que es lo segundo. Incluso en términos más prácticos: se trata de endulzarle la salida al dictador, salvándole la cara.

Lo de Siria ha ida tan lejos en términos de vidas perdidas (150 mil) y existencias destruidas (5 millones), que democracia y pluralismo ya no son negociables. Demasiado han invertido la gente de Siria para quedarse con menos. Sólo falta negociar cómo establecerlos lo más pronto y menos costoso posible. 

El siguiente tema: Colombia, las negociaciones entre el gobierno de Santos y las FARC; el rol de nuestro anfitrión Noruega como mediador, junto a Cuba. Una pregunta parecida: ¿Qué más que una rendición elegante y no humillante de las FARC se puede conseguir mediando en este conflicto? Nada.

Alguien pregunta: Si la guerrilla colombiana ya está derrotada, ¿por qué negociar con ella? Un catedrático colombiano lo explica de manera convincente: primero, porque es importante negociar el fin de la violencia política, para de una vez por todo quitarle a los que siguen usando la violencia criminal cualquier justificación ideológica; y segundo, para evitar que el gobierno salga ganando la guerra, porque si esto pasa, nunca se van a discutir en Colombia la necesidad de reformas sociales y las horribles violaciones de derechos humanos por parte de los militares.

Surgen dos grandes tabúes: amnistía e impunidad. ¿Es posible llegar a un acuerdo de paz que incluya que todas las partes (FARC, ejército, paramilitares) se sometan a la justicia penal y paguen por los crímenes y violaciones a los derechos humanos cometidos? Para la mayoría de los presentes, amnistía es mala palabra. Así como en ciertos círculos en El Salvador, todavía, a pesar de que la amnistía nos permitió parar la violencia política. Cuando yo les dije a los colombianos: Si en serio quieren un acuerdo de paz, estén preparados a pagar el costo: una amnistía que permite a los guerrilleros de las FARC deponer las armas e reinsertarse a la sociedad. Y que permite a los militares aceptar el acuerdo de paz. El problema: Nadie en Colombia quiere decir esto en voz alta, aunque todos saben que es un dilema real: este conflicto, o se desarticula con los métodos clásicos del sistema penal o negociando la paz con amnistía. Ambas cosas son excluyentes. Y sólo la segunda opción es realista. La otra significa mantener viva la guerra y la matanza...

El día siguiente está en la agenda El Salvador y su tregua. Sobre esta discusión  escribiré en la carta para sábado...

Saludos desde Oslo, donde a la medianoche todavía hay luz del día,

Paolo Lüers 
(Más!/EDH) 

Video sobre el Oslo Forum (en general, no sobre el recién realizado en junio 2013:

martes, 18 de junio de 2013

Carta de Oslo

Cuando ustedes lean estas líneas, yo estaré en Noruega, participando en el Décimo Oslo Forum. Esto es un evento, organizado por el Centro de Diálogo Humanitario y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega, que una vez al año reúne personas que en diferentes partes del mundo están involucrados en procesos de paz para dar soluciones creativas a conflictos violentos.

Tengo el honor (y el enorme reto) de haber sido invitado a dar a conocer y exponer al examen crítico el proceso de reducción de violencia que el año pasado comenzó en El Salvador con la tregua entre las pandillas. El Salvador y su intento de alcanzar la paz social está en el centro de los debates y análisis de especialistas en mediación y resolución de conflictos de más de 100 países del mundo, junto con 4 otros países: Siria, Birmania, Mali, Somalia.
La idea central del Oslo Forum es el intercambio de experiencias entre procesos de paz en todo el mundo, este año bajo el título: “Conceptos innovadores de mediación de conflictos”.
Voy para Oslo, principalmente para aprender. Lo que aquí estamos haciendo para reinsertar a la vida productiva y al imperio de la ley a miles de pandilleros y a desmontar una escalada de exclusión, represión, violencia y criminalidad que ha bloqueado el desarrollo de nuestro país, necesitamos confrontarlo con la experiencia en otros países, otras culturas, otros conflictos.
Pero también hay que reconocer que luego de la manera exitosa y ejemplar que los salvadoreños negociamos el fin a nuestra larga guerra civil, y luego de que ahora logramos una reducción sostenible de homicidios como no la conocen en ningún país, el mundo nos está comenzando a ver como expertos en solución de conflictos. Ya no nos ven simplemente como uno de los países más violentos, sino como un país que por segunda vez en 25 años da lecciones al mundo en materia de paz. Esto debería llenarnos de orgullo, no sólo a todos los participantes directos en este proceso de una tregua que se convierte en construcción de una paz sostenible, sino al país entero.
A este encuentro mundial de mediadores de la paz, este país hubiera tenido que mandar a monseñor Fabio Colindres y Raul Mijango. Este no fue posible. Voy a hacer lo posible a trasladar a este Forum internacional nuestras experiencias, nuestras dudas, nuestras contradicciones y nuestros humildes logros, y también el debate controversial que este proceso ha provocado en nuestra sociedad. Pero sobre voy a tratar de entender y trasladar las experiencias en otros países del mundo donde sociedades están construyendo caminos a la solución de complejos y largos conflictos violentos.
Si el tiempo me lo permite, voy a usar las otras dos cartas de esta semana de transmitirles algunas de la lecciones aprendidos en Oslo.
Les saluda desde Oslo, Paolo Lüers
(Más!/EDH)

sábado, 15 de junio de 2013

Carta al presidente de Ecuador

Estimado Rafael Correa:
Al fin tiene el poder total. Ya hace ratos controla a todos los órganos del estado, lo único que le faltaba era el famoso “cuarto poder”: los medios de comunicación.

El viernes pasado, el parlamento ecuatoriano aprobó, al fin, la Ley de Comunicación que tanto quería usted. Y con ella, usted tendrá juguetes nuevos para jugar a déspota: una Superintendencia de Información y Comunicación y, como si esto no fuera suficiente, un Consejo de Regulación y Desarrollo de la Comunicación...

Los periodistas que hemos ejercido esta noble profesión en muchos países con sistemas jurídicos y políticos muy distintos, sabemos de experiencia: cuidado donde exista “regulación” del gobierno sobre los medios. Cuidadito donde muevan papeles y sellos los burócratas, con la facultad de decidir cómo y hasta dónde se puede ejercer la libertad de expresión.

Ecuador ya tenía una estrella roja en el mapa que tenemos los periodistas de los países donde hay que andar con cuidado. ¿Cómo ejercer periodismo con toda confianza en un país donde el presidente logra que condenen a un colega a pagar (al gobernante) una multa de 30 millones de dólares por haberlo’ofendido’?

Claro, usted no puede hacer esto cada rato, sería demasiado desgaste para un político. Mejor crear una ley, una supertendencia, un consejo de regulación, y toda una burocracia que se encargue de controlar a los opositores, a los críticos, y a todos que se creen las pajas de la independencia de los medios y de la libertad de expresión. Lo que usted está creando es una especie de policía de opinión...

¿Y quiénes van a elegir a los que van a controlar a los medios? Ni siquiera el parlamento. Al superintendente lo va a elegir, de una terna presentada por el presidente de la República, un Consejo de Participación Ciudadana y Control Social. Por todas partes aparece la palabra clave ‘control’ en las instituciones que usted está creando, presidente. Y el Consejo de Regulación (otra de sus palabras favoritas) lo van a integrar: 1 concejal nombrado por usted; 1 nombrado por los gobiernos autónomos descentralizados; 1 por las organizaciones de los pueblos y nacionalidades indígenas; 1 por los consejos nacionales de Igualdad; 1 por las facultades de periodismo; y el sexto que represente las asociaciones de comunicadores y de derechos humanos...

Si esto, señor presidente, es la “revolución ciudadana” y el “buen vivir” que usted propaga, tendremos que armarnos de resistencia para que nadie importe estos modelos aquí.

Saludos a usted y sus amigos Evo Morales, Nicolás Maduro, Cristina Kirchner, Daniel Ortega y Salvador Sánchez Cerén, quienes juntos andan tejiendo sistemas de control sobre la sociedad, los ciudadanos, los medios y la libre expresión. 

La respuesta es: No, gracias. Paolo Lüers
(Más!/EDH)

viernes, 14 de junio de 2013

El gritón de ARENA y el "bully" de ANDA

El otro día conocí al gritón de ARENA, al personaje del spot de televisión que ya critiqué en otra columna. Así como el tipo me cayó mal en la tele, me cayó muy bien en persona. Uno es macho, el otro es un joven humilde; uno grita, el otro habla normal y pausado.

Voy a compartir con mis lectores la increíble historia que me contó. La historia del gritón de ARENA y el "bully" de Anda.

Resulta que el joven viene de una familia de areneros. Trabajó en la Secretaría de Juventud dirigida por César Funes, bajo la presidencia de Saca. Luego, cuando César Funes asume la presidencia de Anda, se lleva a nuestro joven. Trabaja de administrativo en el laboratorio de calidad. En su tiempo libre recibe formación católica. Su catequista y mentor: un señor llamado Marco Fortín.

Cambia el gobierno. Pasan algunos meses y aparece como nuevo presidente de Andael mismo señor Fortín. Nuestro joven ya estaba terminando sus estudios de mercadeo y por sus conocimientos le encargaron la venta de los servicios del laboratorio de calidad de Anda. Pero nunca le subieron el sueldo. Es más, fue el único en el laboratorio al que no le subieron nada, a pesar de su amistad con Fortín. Somete su título universitario a Recursos Humanos, pero nuevamente: nada de nivelación. En vez de esto, Fortín manda a investigar cuándo, con quién y por qué el joven había entrado a Anda. Ya el joven entiende el mensaje: me marginan por arenero.




Para completar sus ingresos comienza a trabajar, en su tiempo libre, como modelo para anuncios. Está en la lista de casting de varias productoras. Un día una productora lo llama al casting y le ofrece grabar un spot de ARENA. Acepta con una condición: hay que rodar afuera de su horario de trabajo en Anda. Se convierte en el famoso gritón.

Graban todo el sábado y hacen la sesión de fotos el lunes en la madrugada. Se presenta a tiempo al trabajo. El miércoles se reporta enfermo, en el Seguro Social le dan incapacidad para el resto de la semana. El mismo miércoles, por la noche, sale al aire el spot. El jueves por la mañana Fortín lo busca en el laboratorio. Le informan que está enfermo. El presidente de Anda le habla a su casa. Dice cosas como: "¿Y vos qué te creés? Ni un perro muerde la mano de quien le da de comer..."

El joven le trata de explicar que él trabaja de modelo en su tiempo libre. El presidente: "No me importa, pendejo, ¡mejor callate, (*)!"... Y le cuelga.

La tarde de jueves, el jefe del laboratorio informa al joven que recibió órdenes de despedirlo; que el lunes vaya directamente a Recursos Humanos, que funciona en otra sede de Anda. El viernes, su jefe le habla para informarle que a lo mejor no lo van a despedir.

El lunes, el joven va directamente a Recursos Humanos. Luego de una larga espera aparece el gerente y le informa que el presidente ha decidido no despedirlo, solamente lo amonestarán verbalmente, porque "ningún empleado público puede involucrarse en proselitismo". El joven argumenta que esto es válido para funcionarios, pero no para empleados.

Le dicen que se presente a su trabajo. Llegando al laboratorio, inmediatamente lo llevan a la presidencia. Lo esperan Fortín y tres de sus asesores. El presidente le cuenta que tiene "chequeados a todos los areneros en la institución". Y le muestra las fichas en la pantalla de su computadora: nombres, fechas, domicilio, fotos, familiares, etc.

El presidente: "¿Te gustaría que te peguen en las nalgas? Esto has hecho vos con este spot. Me traicionaste. No te he tocado en tres años, aunque sabía que sos arenero. Me metiste en un gran huevo, hasta el presidente Funes ya sabe de esto..."

Al final le dice: "Pero no te voy a echar. Vas a hacer los anuncios para Anda —y para el partido. Vos vas a ser el modelo y símbolo de Anda, vamos a hacer unos anuncios vergones..." Y le ordena a uno de sus asesores: "Escriba ya los guiones, pero que sean buenos. Porque este comercial de ARENA es paloma, hay que reconocerlo. Nos dolió".

Le pregunta tres veces al joven si está de acuerdo de convertirse en el modelo para Anda y para el partido. Sin recibir respuesta. Y sin aclarar si habla del FMLN o de Gana. De manera de despedida, Fortín le dice: "El único que te dio de hartar soy yo. ¿Creés que te van a defender Paco Flores o Norman? A este (*) lo puedo hacer m..., me debe más de tres millones..."

El martes, a primera hora, el joven vuelve a Recursos Humanos e interpone su renuncia. Le preguntan por qué y dice: "Por acoso por parte del presidente de Anda". Y a mí, cuando me lo contó, me lo explicó así: "Por dignidad".

(*) En las conversaciones reproducidas se usaron algunas palabras que no me atrevo a publicar...

(El Diario de Hoy) 

jueves, 13 de junio de 2013

Carta a don Enrique Altamirano

Hoy leí una frase suya que me impactó: "Pese a la ilusión de muchos sobre la posibilidad de corregir conductas y lograr que criminales tomen el correcto camino y se conviertan en personas de bien, la realidad humana es otra, siendo una cuestión de genética, de formación, de complejos, de fanatismos, de 'mala sangre'."


Esta frase me hace realizar en qué problema extremadamente grave estamos como sociedad. De repente nos vemos obligados a enfrentar un problema que durante años hemos obviado. Cada uno y toda la sociedad nos hemos sistemáticamente negado a enfrentarnos a una realidad, así como a veces hacemos los humanos cuando es demasiado triste reconocer la realidad, y cuando cuesta demasiado valor enfrentarla. Represión llaman los sicólogos este mecanismo de defensa.


Pero de repente pasa algo que nos rompe las defensas y nos obliga abrir los ojos y ver la cruda realidad. En este caso, lo que nos obligó a enfrentar la realidad fue la maldita tregua entra las pandillas. Qué susto que en una sociedad tan llena de violencia como la nuestra, los que ponen en la agenda del país la idea de desmontar el monstruo de la violencia, sean los pandilleros. Qué ofensa que en un país que cobardemente ha delegado su problema de violencia epidémica a la policía y los carceleros, las voces que nos obligan a asumir nuestra responsabilidad y enfrentar el problema de la marginación de buena parte de nuestra juventud no salgan de la iglesia, ni de las universidades, sino ¡de las cárceles!
¿Y no hemos durante años, décadas enteras, exigido que nos quitaran de la vista esta escoria humana, a estos animales que se llaman mareros? Así pudimos ser tranquilos: que los encierran en cárceles lo más apartados de nuestra vista, y boten la llave. Y por más infrahumanas las condiciones de vida en estas cárceles, mejor.


Y de repente desde adentro de estas cárceles salen voces que hablan de paz. Y para colmo, nos quieren obligar a ver que detrás del hecho que tengamos 50 mil jóvenes fuera de la ley existe un problema de marginación social en los barrios; que detrás de l a escalada de la violencia hay una deuda social no pagada. Y para colmo de los colmos, se hacen escuchar. Encuentran cómo comunicarse con la sociedad. Tienen voceros. ¡Hasta aparecen en televisión!


Claro que la sociedad, que durante décadas se ha negado la existencia de este problema y de esta deuda, reacciona violentamente cuando los pandilleros, en vez de silenciosamente podrirse en sus cárceles, irrumpen a la escena nacional y hablan de diálogo y paz. Claro que recibe aplausos el nuevo ministro que despide a quien autorizó la aparición en televisión de dos pandilleros y prohíbe su contacto con la prensa.


La frase que cité al principio, tomada de un editorial suyo en El Diario de Hoy, simboliza la resistencia de la sociedad de enfrentarse al problema. Esta resistencia, en otros ámbitos, se vuelve hasta violenta: vea los miles de insultos y amenazas que diariamente están recibiendo quienes tratan de promover este diálogo y quienes plantean que la tregua es una oportunidad para empezar a enfrentar, entre todos, la violencia como un problema integral que requiere de soluciones integrales, no exclusivamente penales.


La última línea de defensa para los que se niegan a aceptar este reto es la teoría de la "mala sangre": los malos son malos, porque tienen malos genes. Los heredaron de sus padres y abuelos, y igual de malos serán sus hijos y nietos. Por tanto, no necesitamos preguntarnos qué hemos hecho mal como sociedad. Y no tiene sentido hablar con ellos o tratar de reinsertarlos. Vuelvan a cerrar herméticamente las cárceles y boten las llaves. Y déjennos tranquilos, sin ver a pandilleros en televisión. No quiero poner esto en la boca suya, don Enrique, pero así lo entenderán muchos.
Que bueno que usted tenga el valor de exponer esta teoría, porque es parte del problema y hay que enfrentarla. Por suerte, el debate ya no se puede apagar. La caja de Pandora está abierta, y están saliendo cosas muy buenas y cosas muy feas. Qué bueno: Por más que algunos quieran apagarlo, el debate continuará, y la sociedad comenzará enfrentar su cruda realidad. Primer paso para cambiarla. Y qué bueno que este periódico se atreve a albergar este debate.


Saludos, Paolo Lüers
(Más!/EDH)
Aqui el link para leer el editorial de El Diario de Hoy arriba citado:
http://www.elsalvador.com/mwedh/nota/nota_opinion.asp?idCat=50838&idArt=7958452

martes, 11 de junio de 2013

Carta a Miguel Peñalba

Mi querido amigo:
Se van de regreso a España, tú y Cristina y sus hijas, luego de 8 años de vivir entre nosotros. Ocho años en un país extraño pueden ser un episodio que no deja mayor huella, o pueden ser un capítulo de tu vida que te marca para siempre. Depende de qué pasa en estos 8 años, y en qué etapa de tu vida sales de tu patria, de tu rutina, de tu carrera predecible...


Ustedes pasaron en El Salvador 8 años verdaderamente intensos y movidos. De pareja joven e independiente, se convirtieron en padres de familia. Tú de ejecutivo en misión internacional te convertiste en empresario. No llegaste simplemente a administrar la empresa Calvo El Salvador, llegaste a construir la fábrica de atún en La Unión y la flota pescera del Pacífico, y a crear toda la operación centroamericana. Llegaste a transformar la sucursal de una empresa española en una empresa salvadoreña.

Tú Cristina, de la esposa que acompañaba a su marido, te convertiste en empresaria de turismo – y empezaste una carrera artística y de fotógrafo que te cambió profundamente...

Cuando todas estas transformaciones personales y profesionales transcurren durante la estadía de uno en un país extraño, este país al rato deja de ser extraño. Hablo de propia experiencia. Yo llegué a El Salvador en 1981. Y cuando habían pasado 8 años, en 1989, me di cuenta que tenía 2 patrias: una donde nací y crecí, que se transformó profundamente, pero sin que yo haya estado involucrado -- y otra que la vi transformarse ante mis ojos y con mi humilde participación. No entendí lo del muro de Berlin, pero entendí perfectamente lo que significaba la ofensiva guerrillera sobre San Salvador y es asesinato de los jesuitas: la transición de la guerra a la paz.

Por esto les dije, Cristina y Miguel: O se regresan a su primera patria ahora, cuando todavía pueden, o al rato este país ya no los dejaría salir. En la despedida la otra noche vi a ambos tratando a retener las lágrimas. Cuesta abandonar un país que te ha visto madurar, superarte y transformarte. Yo nunca lo pude hacer. Lo que también tiene su costo, real y emocional, porque la otra patria, la que te vio crecer, tampoco te libera del amor y de la lealtad.

8 años y todo el trabajo y las amistades que hicieron aquí son suficientes para que, aunque nunca regresen, siempre serán parte de esta nueva patria que los adoptó y que ustedes abrazaron. Por supuesto que van a regresar. Y por supuesto que los vamos a ir a ver en Galicia. Al fin tengo un buen pretexto para regresar a esta tierra gallega, donde pasé los meses más felices de mi vida aprendiendo español, enamorado de la ciudad de Santiago de Compostela – y de una de sus ciudadanas en particular.
No conozco a nadie que en 8 años haya hecho tantas amistades como ustedes, con tanta gente tan diferente, artistas y empresarios, ricos y pobres. Esto sólo es posible cuando alguien hace amigos trabajando - y también vagando. Solo el tiempo libre no es suficiente para forjar y mantener tanta amistad. Ustedes tienen este don. Por esto nos harán falta.

Suerte te deseo a ti y tu bella esposa Cristina. Cuiden a sus hijas y sigan viviendo esta locura de amar dos patrias.

Su amigo Paolo Lüers






sábado, 8 de junio de 2013

Carta a los lectores de periódicos, radioescuchas y televidentes

Estimado público:
A lo mejor no saben  apreciar siempre el privilegio que gozamos de poder escoger entre periódicos de derecha y de izquierda; entre radios comerciales y comunitarios, radios del FMLN y de la izquierda radical; entre radios del gobierno y de la empresa privada; radios de Elías Antonio Saca y de los evangélicos; entre televisoras que critican al gobierno hasta cuando tiene razón, y otras que lo defienden hasta cuando comete barbaridades; entre un canal de Will Salgado y otros de Toby y de Nayib Bukele. Y además de poder navegar en facebook y twitter, donde cada uno se expresa sin limitación ninguna.

Este privilegio se llama libertad de prensa, otros la llamen libertad de expresión, otros el derecho a la información y la transparencia. La pluralidad de opiniones y verdades puede generar confusión: Todo parece relativo, y cada uno de nosotros tiene que sacar sus propias conclusiones y tratar de encontrar la verdad. Cuesta.

Pero cuidadito cuando vienen y tratan de “poner orden” en esta jungla de opiniones y noticias contradictorias. Siempre terminan imponiendo una sola verdad y una sola opinión. Y como esto es imposible, porque atenta contra la naturaleza humana, terminan con represión.

Normalmente este peligro emana del Estado, o de sus brazos el partido y el movimiento popular. Como en Venezuela, donde cerraron, por orden del presidente, varias televisoras y docenas de radios que no se sometían al lineamiento del pensamiento único del partido de gobierno. A los demás medios los sometieron a presión, y más que alguno dejó de hablar de político, incluso dejó de dar noticias. Quedaron unos cuántos que siguieren resistentes a la censura. Y estos ahora los están comprando grupos empresariales que viven de los negocios multimillonarios con el gobierno. De esta manera, acaban de callar a Globovisión, el último canal de televisión no alineado al gobierno, luego de acosarlo y quebrarlo. Quedan los periódicos. Hace un par de días compraron la más grande empresa editora de diarios, dueña entre otros de Ultimas Noticias, el rotativo más popular y grande de Venezuela. Quedan El Nacional y El Universal, ambos al borde de la quiebra por el acoso político, financiero y judicial del gobierno. Y ya hay compradores haciendo ofertas...

Lo mismo pasó hace poco al Nuevo Diario en Nicaragua. El boicot del gobierno lo llevó al borde de la quiebra, entonces el gobierno ofreció comprarlo, y lo terminó comprando un empresario que hace buenos negocios con Daniel Ortega. Lo mismo pasó con varios canales de televisión. Fin de la pluralidad.

Cuento todo esto para que entendamos que, aunque aquí el gobierno no anda cerrando medios ni comprándolos, no estamos exentos de peligro. Los tentáculos de Albapetróleo ya se metieron con los medios. Ya compraron licencias de televisión, ya compran radios (la Sonora, la 102.1). Ya Nayib Bukele maneja el canal TVX, ya Saca compró la influyente 102.9. Ya existen rumores sobre ofertas indecentes a los dueños de canales de televisión como el 12, Megavision y el 33...

Y ya vemos que algunos medios comerciales grandes “suavizan” sus posiciones editoriales para no entrar en pleito con el gobierno – y en problemas financieros que los hagan vulnerables... No voy a decir nombres, pero todos saben de cuáles estoy hablando...

Los periodistas, el público y la comunidad empresarial (los anunciantes) tenemos que ponernos buzos para que se mantenga el privilegio de poder escoger entre medios con diferentes líneas editoriales. Algunos dirán: No hay medios independientes. Tal vez. Pero mientras no todos dependan del mismo poder, sino de varios intereses opuestos, existe pluralidad.

Saludos, Paolo Lüers
(Más!/EDH)

jueves, 6 de junio de 2013

Carta a los papás


Estimados compadres:
Hay regalos que nadie pide y nadie quiere. Entonces, mejor las devolvemos, y si esto no es posible sin ofender, los botamos o los engavetamos. Tengo una gaveta llena de estos chunches.

Hoy nos cayó un regalo que es peor. Es un regalo impuesto: el día del padre con asueto nacional obligatorio para el sector público y el sector privado.

No sólo que nadie lo pidió, el colmo es que los diputados de GANAFMLN nos lo regalan, pero los que tenemos que pagarlo somos nosotros mismos. Lo recibimos como padres y lo pagamos como ciudadanos, sea en calidad de contribuyentes (pagar el día feriado a todos los empleados públicos), sea en calidad de consumidores (porque no crean que las empresas van a asumir este costo extra, sino lo van a pasar a sus clientes).

Lo que los padres de familia estamos pidiendo (más bien, exigiendo a gritos) no es un día más de vacación o de pago doble, sino empleo, crecimiento y seguridad. Ya calcularon que este regalito electoral va a costarle a la economía salvadoreña 12 millones de dólares al año. Así que tienen razón los industriales que piden que se derogue esta tontería. Pero, ¿cuál es la respuesta de los diputados del FMLNGANA? Si siguen jodiendo, vamos a decretar lo mismo para el día de la madre. Y luego el día del niño, el día del chucho, el día de la secretaria, etcétera...

Yo no tengo nada contra el día del padre. Muchos países lo celebran, pero lo celebran, igual que el día de la madre, un determinado domingo cada año. Así es en Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y Holanda. No se dan el lujo de decretar asueto para celebrar el día de la madre o el día del padre. En Alemania el “Vatertag” tiene una gran tradición: lo pusieron encima de una fecha religiosa, que de todos modos tenía asueto. El día de padre se celebra en grande: con excursiones colectivas e inmenso consumo de cerveza. Muchos le dicen el “día de la cervecerías”, así como el día de la madre (segundo domingo de mayo) es el “día de las floristerías”. Pero a nadie se le ocurre parar la economía para estas fechas. Todo el mundo va a joder el día del padre, pero cada uno paga su cuenta, no el estado o la economía nacional. Y así tiene que ser.

En vez de decretar este tipo de tonterías, los diputados deberían abolir estos días. Ciertamente abolir el asueto. No es por decreto que vamos a celebrar a las mamás o a los padres, sino por ganas de darles un homenaje.

Este regalo, que no pedimos y no podemos devolver, es una ofensa.

Saludos a todos los padres, celebremos el placer de tener hijos. Y los diputados que no se metan.

Saludos de Paolo Lüers
(Más!/EDH)

martes, 4 de junio de 2013

¿Recuperar la finca perdida?


Me alegro que al fin Arena, su candidato y su equipo hayan logrado darle dirección y personalidad a su campaña. Sólo que no me gustan. Sin embargo, les deseo suerte, porque ciertamente no podían seguir en esta angustiante falta de rumbo, definición y liderazgo.

Empecemos con el eslogan principal: “Juntos vamos a recuperar El Salvador.” Okay, suena fuerte. Entiendo que es un mensaje principalmente hacía el interior de las propias bases del partido. Puede ser que en este sentido funcione. Pero dirigido hacía afuera, hacía el disputado centro de la sociedad, este mensaje es fatal. ¿Cómo que recuperar al país? ¿Acaso era suyo y quieren que vuelva a ser suyo?

¿Juntos quiénes? Los que no son del partido y no han sido del gobierno, no han perdido el país en el 2009. Suena muy feo: Todos juntos los que mantuvieron el poder durante décadas lo quieren recuperar; quieren recuperar su país como su fuera una finca perdida. Así suena. Lo que la campaña plantea es dar un paso para atrás, al pasado. Esto puede ser agradable para los bases de Arena, aunque dudo que para todas. Pero ciertamente no es atractivo para el centro de la sociedad, donde se encuentra la mayoría de los indecisos. Estos buscan un rumbo hacía adelante, al futuro. Recuperar es restablecer el estatus quo de antes. Recuperar es restauración. Pero el país no necesita restauración, sino reforma. Son dos rumbos contrarios: o van para atrás o van para adelante.

La sociedad quiere escuchar otro mensaje: Juntos vamos a construir el país del futuro. Ni siquiera reconstruir: construir. Esto sí es incluyente. Esto sí es rumbo. Esto sí da ánimo. El concepto de recuperar incluye solamente a los que sienten que les han arrebatado un país que legítimamente es de su propiedad.
Si yo tuviera que decidir mi voto solamente en base de los anuncios que veo en estos días, votaría por el FMLN.

Si comparo el spot del gritón de ARENA con el spot de 4 años de gobierno del FMLN con los  niños corriendo, no hay otra: el gritón, la arenga, las consignas, las banderas me saben a pasado. El lenguaje y los gestos del patriotismo barato al estilo de los igualmente insufribles anuncios del Agrícola me cae en los huevos. En comparación, el spot del FMLN es simpático, expresa civilidad, es mucho mejor realizado, y no usa banderas ni consignas. Claro, no creo ninguno de los mensajes, porque no creo en las promesas cumplidas, por esto no hay peligro que vote por ellos. Pero repito, si solo fuera por los anuncios, otra cosa sería...

Regresemos a la nueva campaña de Arena.: “Luzcamos con alegría nuestros colores. Cantemos con orgullo nuestro himno.” Bueno, entiendo que quieren darle ánimo a sus bases que estaban desmotivados y con mucha duda sobre la identidad de su propio partido. Correcto. Pero nuevamente: Animar a las bases con el grito “Adelante al pasado” no funcionará, y mucho menos funcionará con los sectores críticos, independientes y profesionales que necesitan que los convenzan que votar por Arena no es votar por el pasado...

Para darles ánimo a su propia gente y al mismo tiempo a la agente fuera del partido, Arena tendría que haber adoptado precisamente lo contrario, lo audaz, la ruptura: Vamos a hacer las reformas que nadie se ha atrevido a hacer - ni nosotros en el pasado, ni la izquierda en el presente. Vamos a combatir el autoritarismo y la corrupción con más democracia, más transparencia, más pluralismo, más debate, más crítica, más concertación, y con instituciones más independientes...  Para lograr esto, vamos a dejar en el museo nuestro himno y los retratos del mayor. Vamos a seguir usando nuestra bandera, pero no en primer plano. La bandera detrás de la cual vamos a unir a la gente no es la de Arena sino la del futuro.

El estilo de la campaña, así como sus contenidos, tendrían que ser civil, no militante. De otra manera nadie en los sectores urbanos, profesionales, jóvenes de clase media (que son los que van a decidir las elecciones) se podrá identificar con la candidatura. La campaña tiene que expresar una cultura de ciudadanos, no una cultura interna, excluyente y militante. Para ganar estas elecciones, hay que convencer votantes y no reclutar brigadistas de pinta y pega.

Con este estilo de campaña, con estos mensajes, con este lenguaje, Arena corre serio peligro que, a pesar de la falsedad de su posición centrista, siga creciendo Saca, aprovechando que nadie está ocupando el centro de la sociedad. Y que siga incluso creciendo el FMLN, si en serio está dispuesto de abandonar su estrategia tradicional de inundar el país con banderas, camisetas, y gorras rojas, como siempre han hecho. Cambio que no pienso muy probable luego de ver la puesta en escena chavista del 1 de junio en la autopista sur y el Bulevar Diego Holguien.

Con esta nota estoy iniciando una serie de artículos para que retomarán el origen de estas columnas que iniciamos en el 2008 bajo el nombre “Observador Electoral”. Incluirá opiniones, crónicas, entrevistas y análisis de las tres campañas que compiten por la presidencia. Saldrían semanalmente hasta terminar el proceso electoral.
(El Diario de Hoy)


Carta al fiscal general de la República


Estimado Luis Martínez:
Nunca quise polemizar ni mucho menos confrontar con usted. Porque sigo convencido de lo que le expresé en un mensaje en twitter hace un par de semanas: “Usted tiene la obligación de perseguir el crimen, nosotros tratamos de prevenirlo. No puedo creer que las dos tareas no sean compatibles.” Cuando digo ‘nosotros’, me refiero a todos que estamos en el esfuerzo de reducción de la violencia que empezó con la tregua entre pandillas, pero que hace ratos la trascendió...

Así que hoy tampoco voy a polemizar. Pero como usted decidió avisarme por los medios de comunicación, y no de forma personal o con citación formal, que la fiscalía me quiere ‘entrevistar’, también le contesto en un medio: Con mucho gusto participaré en esta entrevista, aunque no tengo claro qué es una entrevista en la fiscalía: ¿Es un interrogatorio? ¿Es un testimonio? ¿O es para recibir alguna notificación que seré sujeto de investigación?

Uno de mis amigos juristas me informó que al decir en público la fiscalía que me citará en el contexto de una investigación, tengo que mandar a mi abogado a indagar en qué calidad y con qué propósito me quieren citar: testigo, sujeto de investigación o acusado de un delito...

Sin embargo, se trata de un problema político más que jurídico. Por la simple razón que participando en la organización de la entrevista a los pandilleros no puedo haber cometido ningún delito. Pero sí me metí en el ojo de un huracán político y mediático.

Entiendo que el único hecho con posible relevancia jurídica que usted puede investigar es el permiso de traslado de los reos. La entrevista como tal, como hecho mediático, religioso y político, no puede ser sujeto de investigación. Por esto no entiendo en qué calidad y con qué propósito la fiscalía quiere “entrevistar” al entrevistador, el pastor Toby jr, o a este servidor. Hay quienes piensan que fue ilegal que a los dos reos los hayan trasladado de su respectiva cárcel al Tabernáculo. Yo no comparte esto. Pero bueno, esto es sujeto de investigación. Pero nadie puede racionar que realizar la entrevista (en el caso de Toby) o incluso proponer su realización (en el caso mío) puede ser un delito.

Ciertamente ni Toby ni yo somos ejecutores de la Ley Penitenciaria. No formamos parte de la toma de decisiones sobre permisos o traslados de reos. Difícilmente un comunicador comete delito al mandar cualquier solicitud, incluso la más descabellada e imposible de atender positivamente por parte de las autoridades. Así que al pastor y a mi persona, si nos quieren investigar, estarían investigando un acto periodístico – y esto, usted bien sabe, sería muy delicado.


Así lo veo, fiel a mi convicción que la aplicación de la justicia no puede ser otra cosa que la aplicación de la razón común. Y la razón común me indica, repito, que el caso en discusión es un asunto político y no realmente jurídico. Esto lo confirma su propia decisión de incluir en su “investigación” a los actores que intervienen políticamente y como comunicadores, pero que administrativamente no tienen nada que ver con el sujeto de esta investigación: la manera que fueron otorgados los permisos que hicieron posible la participación y los traslados de los privados de libertad. Si usted tiene otra opinión y considera sujeto de investigación también la parte periodística del asunto, por favor nos notifique debidamente esta decisión de abrir una investigación que compromete la libertad de prensa.

Me es casi imposible imaginarme esto, conociendo su profesionalidad y su compromiso con el estado de derecho.

Con mucho respeto y toda confianza le saluda Paolo Lüers
(Más!/EDH)

domingo, 2 de junio de 2013

Carta al nuevo ministro de Seguridad


Estimado Ricardo Perdomo:
Arrancó mal en su nuevo cargo. Pensó mandar un mensaje de hombre fuerte, pero en el fondo fue una señal de debilidad, indefinición y ambigüedad. Porque su primer acto fue ceder a la presión política, sacrificando a uno de sus funcionarios claves, el director general de Centros Penales Nelson Rauda. Parece que funcionó para reducir la presión: Le aplauden, como si mandar al carajo a un súbdito fuera un acto valiente. Pero ojo: Le aplauden precisamente los mismos que siempre querían doblarle el brazo al gobierno para que se retracte de su rol de facilitar, primero la tregua - y luego el intento de convertirla en un proceso de reconciliación entre los pandilleros y la sociedad.

¿Cuál acto valiente? Usted sólo obedeció las órdenes del presidente, que pidió la cabeza de Rauda porque, tampoco aguantaba la presión y necesitaba un chivo expiatorio. El presidente y sus asesores de imagen están leyendo las mismas encuestas que Norman Quijano y Elías Antonio Saca, quienes ya decidieron mejor apostar nuevamente a consignas de mano dura...

Usted prometió construir un acuerdo nacional para reducir la violencia. Pero los acuerdos sólo funcionan cuando se construyen con liderazgo, claridad y valentía. Usted tuvo la oportunidad de oro para mostrar que es suficiente hombre para liderar un proceso tan complejo y controversial. Pudo haberse ganado la confianza que aquí se construye una política que no va a cambiar con cada encuesta. Para construir esta confianza, en vez de acobardarse ante la primera tormenta de opinión pública, usted hubiera tenido que defender la política de diálogo del gobierno. Hubiera tenido que poner el pecho a la hola de indignación hipócrita que se desató por la entrevista de los dos pandilleros en el Tabernáculo. Hubiera tenido que decir sin vacilación: Nosotros estamos fomentando que los pandilleros en público, ante la gente, se comprometan con la tarea de construir la paz.

No tuvo el valor para defender una política audaz, correcta y exitosa. ¿No entiende que están atacando a Nelson Rauda, no por el permiso que dio para que dos reos participaran en un acto religioso y periodístico en el Tabernáculo de Toby. Lo atacaron tan ferozmente por los permisos que antes ha dado para facilitar, desde el sistema carcelario, el diálogo entre pandillas y entre pandilleros y mediadores, y sobre todo el incipiente diálogo entre pandillas y sociedad civil.

Y ante este ataque, el nuevo ministro (y el presidente) se acobardan y declaran: “Se acabaron los privilegios de los pandilleros.” Y sacrifican a uno de sus funcionarios más eficientes y visionarios. Suspenden, por decreto ministerial y de manera total, cualquier acceso de la prensa a los cárceles y los internos. Ya el jueves pasado El Faro no pudo realizar, por “órdenes desde arriba”, una entrevista (debidamente autorizada por Rauda) a un pandillero encarcelado que quería informar sobre el acoso ilegal que recibe de parte de personeros de la fiscalía y de la embajada norteamericana para distanciarse de la tregua. ¿Esta es la nueva política de su ministerio?


De repente son “privilegios” las facilidades que el anterior ministro y Rauda dieron para que los pandilleros, juntos con los mediadores, podían ejercer la labor diaria de bomberos para reducir la violencia. La reducción de los homicidios de 15 a 5 diarios no es resultado de sólo firmar un comunicado. Es producto de una carpintería permanente que no es posible sin la activa participación de los que dirigen las pandillas adentro y afuera de las cárceles. Sin traslados de reos y reuniones no funcionaría esta labor de cortar las múltiples mechas de la violencia. ¿Y de repente estos traslados son privilegios?

¿Esta en riesgo la tregua? Afortunadamente no, porque este proceso de reducción de la violencia en el cual están metidos los pandilleros, y este proceso de reinserción definitiva que están buscando, nunca dependió del gobierno. Ni de este ni del siguiente. El gobierno puede facilitar este proceso o complicarlo, hacerlo más rápido o más lento. Pero no lo puede suspender.
Mucho depende de sus próximo pasos, ministro.

Saludos de Paolo Lüers
(Más!/EDH)