martes, 10 de diciembre de 2013

Carta a Jorge Velado

Estimado Jorge:
Las oportunidades o se aprovechan, o se pierden. Nunca esperan a los claudicantes. Es hoy o nunca que tienes que asumir el liderazgo, Jorge. Eres el presidente del partido ARENA, pero hasta ahora no lo has dirigido de verdad. Los líderes históricos y los poderes fácticos han seguido piloteando el barco. Pero el rumbo no ha cambiado. Los tales poderes no lo cambiaron pero tampoco dejaron que otros, por ejemplo tú, lo hagan. Hoy es cuando, estimado Jorge: Tienes que golpear la mesa, si es necesario voltearla, tomar el control, definir el rumbo y navegar adelante..

Tienes que apartar del poder al montón de personajes que quieren que toda siga igual; a los que ya tuvieron su oportunidad (los que la aprovecharon exitosamente y los que no cumplieron); también a los oportunistas que siempre rodean el poder, a los inútiles que se sienten estrategas. Si puedes, apartarlos de manera diplomática, como es tu modo; pero si es necesario, mándalos al carajo.

Para cambiar el rumbo no sólo tienes que cambiar caras, tienes que construir equipo. Hay suficiente talento, voluntad y ganas para producir el relevo y el cambio de rumbo. Sólo hay que soltar los frenos. Además hay una nueva generación lista para acompañarte. Apóyate en ella. De todos modos, Norman no podrá gobernar bien con la misma gente y las mismas recetas. Más vale hacer el relevo ahora, para que se dinamice la campaña y se genere credibilidad.

Ideas hay. Más que suficiente. Hay profesionales, académicos, intelectuales, creativos que pueden aportar al relevo y la renovación del ideario. Sólo hay que abrir las puertas y las ventanas para que entre aire fresco. Esta es la tarea tuya: crear el espacio y abrir las puertas para la renovación.

La gente que te rodea podrá decir: ¿Por qué arriesgarse ahora? - ya tenemos casi aseguradas las elecciones. Bueno, puede ser (aunque tampoco hay que confiarse). Pero el problema principal de ARENA no son las elecciones. Es la parte relativamente chiche. Lo yuca es gobernar, o sea gobernar bien, sin volver a caer en los vicios, errores y abusos del pasado.

Tú tienes la llave en la mano. Te pusieron de presidente del COENA. Lo que tienes que hacer es usar el poder de decisión y de convocatoria que te da este cargo, y el prestigio sólido tuyo para producir el viraje: en la campaña, en el partido, en el futuro gobierno, en la visión.

Si vos te lanzas, te vas a sorprender de cuánta gente (¡y buena!) te harán barra dentro y fuera del partido.

Piénsalo bien, pero no te tomes demasiado tiempo. 
Saludos, Paolo Lüers
(Más!/EDH)