lunes, 11 de septiembre de 2006

Querido candidato escondido...

No te has lanzado, pero te conozco. Te puedo, incluso, describir: Has dirigido instituciones estatales o empresas importantes. Provienes de la izquierda, pero te confían mucha gente en la derecha y en la empresa privada; o al revés: provienes de la derecha, pero te confiamos muchos en la izquierda y en la otra empresa privada (la que no está ligada a ARENA). No importa cual de las dos historias es tuya. Es una diferencia importante, pero para efecto de la alternativa que necesitamos en 2009 da igual.

De todos modos puedes ganar los votos del medio millón de gente que votaron por ARENA (más bien por Tony Saca), por la única razón de estar contra el FMLN; y del otro medio millón de votantes que votaron por el FMLN, pero por la única razón de estar contra ARENA; más en el otro medio millón de gente que no han votado porque están en contra de los dos, ARENA y FMLN, y la manera como entre los dos tienen secuestrado al Estado.

Todos los sabios dicen que nuestro sistema partidario está hecho en piedra y que no hay vida política más allá de los dos partidos grandes. Pero existe un millón de votantes y millón y medio de aptos a votar que no están de acuerdo ni con la derecha gobernante ni con el Frente. Qué falta de imaginación, qué falta de creatividad, qué falta de coraje político de parte de todos los que no estamos de acuerdo con la manera como los dos partidos, en un extraño contubernio de adversarios, tienen secuestrado al país.

Entonces, basta ya con los juegos al escondite: Hay cinco o seis personas –mujeres y hombres- que tienen la llave en la mano. Son ustedes, los candidatos no declarados. O son candidato o son creadores de candidato. Como dije, algunos provienen de la derecha, otros de la izquierda, otros de la empresa privada. Cada uno de ustedes puede ser el candidato de todos ustedes y de todos nosotros. Teóricamente sólo se tienen que reunir y ponerse de acuerdo, cada uno asumiendo su papel. El que presenten ustedes, será. Juntos pueden ganar y transformar al país.

Ustedes ya saben que la alternancia no es de ARENA al Frente. El país no aguanta otro gobierno de ARENA bloqueado por el Frente, ni un gobierno del Frente bloqueado por ARENA y la empresa privada. La alternancia se facilita construyendo nuevas opciones; o sea un sector de la derecha asumiendo el poder abriendo las puertas a la izquierda responsable. O sea un presidente de izquierda que gobierne con los sectores democráticos, responsables y progresistas de la derecha y del empresariado. Sólo así se pueden empezar a diseñar políticas de Estado para seguridad pública, empleo y producción.

Ustedes ya saben todo esto. Ya lo están discutiendo. Saben incluso que esto no significa, para nadie, negar su identidad ideológica. No estoy hablando de revivir la idea de un partido del centro. Ya sabemos que esto no sirve. Estamos hablando de una alianza estratégica entre socialdemócratas, socialcristianos, demócrata-cristianos y liberales. Estoy hablando de un gobierno de transición. De un movimiento de rescate. De la construcción de liderazgo responsable.

Así que, antes de que me sienta obligado a presentar aquí, con todo y fotos, las fórmulas y las listas de gabinete posibles y deseables, salgan del closet. Asuman su responsabilidad. Si no, conformémonos, de una sola vez, que la única alternativa es un alcalde de Oriente.
Mis más cariñosos pero impacientes saludos,

Paolo “el Wagner” Luers.
(Publicado en El Faro)