Estimado Henrique:
A
partir de hoy tú eres el candidato oficial de la oposición a la
presidencia de Venezuela. El hombre que en elecciones primarias recibió
dos mandatos: vencer a Hugo Chávez luego de 13 años en el gobierno; y
llevar a Venezuela al futuro, al Siglo 21.
Tú
ganaste las primarias con abrumadora mayoría, por que eres el candidato
del relevo generacional y de ideas. Eres el candidato que entendió que
antes de poder vencer a Chávez y su concepto obsoleto del Socialismo del
Siglo 21, había que vencer dentro de la oposición a las fuerzas que
sueñan con regresar al pasado. A los que todavía piensan que Chávez fue
un accidente de la historia, porque no quieren entender que Chávez pudo
tomar el poder porque ellos tenían al país en un pésimo estado de
corrupción y exclusión social.
Esta
oposición trasnochada fue derrotada en las primarias de domingo pasado.
El pueblo, no las cúpulas partidarias, decidió el nuevo liderazgo y el
nuevo rumbo de la oposición. Más clara no podía ser la voluntad popular:
99% votaron por líderes con menos de 45 años, y dentro de esta mayoría
60% votaron por ti, el dirigente que mejor entiende las demandas
sociales de la gente y su desconfianza frente a los partidos
tradicionales.
La
contundencia de esta decisión popular y el hecho de que todos los demás
precandidatos jóvenes van a trabajar contigo en la campaña electoral y
en el gobierno de reconstrucción democrática, le da una gran fuerza a la
oposición. De repente hay optimismo: Se puede vencer a Hugo Chávez, a
pesar de su control total sobre el Estado, sus enormes fondos petroleros
y los medios de comunicación.
La
candidatura tuya tiene una ventaja que Chávez no puede equiparar: Es la
candidatura de la juventud. Chávez llegó al poder capturando el
entusiasmo de la juventud por la justicia social. Pero lo perdió con sus
ataques a las libertades, a la autonomía universitaria, a la
independencia de todos los órganos del Estado. Hoy la juventud, la
rebeldía, la intelectualidad están con la oposición, porque ahí es donde
surgió un liderazgo nuevo, creativo, inspirador, ético y progresista.
Yo
sé que ustedes tienen que concentrarse en ganar las elecciones, pero
sepan que están siendo observados por los jóvenes en toda América Latina
que quieren empujar el relevo generacional y de ideas en sus países, y
que a veces encuentran férrea resistencia en los partidos tanto de
izquierda como de derecha.
Suerte, Henrique! No nos puedes fallar.
Paolo Lüers
(Más!, EDH)