Estimados amigos:
Escuché decir al presidente de la República que no tiene idea porqué ustedes renunciaron. Se quejaba que ninguno de ustedes se tomó la molestia de explicárselo a ÉL personalmente: “Ni el doctor Eduardo Badía, ni el licenciado Henry Campos se reunieron conmigo para expresarme en persona las razones que le llevaron a tomar tal decisión...”
¿Cómo le pueden hacer esto al señor presidente? ¡Qué falta de consideración! Ustedes que han estado en este gobierno desde que asumió el poder en junio del 2009, saben perfectamente que el señor presidente en estos dos años y medio no ha tenido tiempo para celebrar consejos de ministros, ni para reunirse con los miembros de su gabinete y conocer sus inquietudes. Ustedes bien saben que este presidente tiene un estilo diferente de gobernar...
Si este gobierno hubiera funcionado de otra manera -con un consejo de ministros que se reúne alrededor de una mesa y discute los problemas para tomar decisiones-, al presidente no le agarraría por sorpresa cada vez que le renuncia un ministro o viceministro.
O más bien, si este gobierno funcionara, a lo mejor ustedes ni hubieran renunciado...
Pero el gobierno funciona de esta manera y no de otra, y lo preside el presidente que tenemos, con su manera de relacionarse (o más bien, no relacionarse) con sus funcionarios. Sabiendo esto de primera mano, por lo menos le hubieran mandado una cartita al hombre. No como estas que yo escribo y hago público. No, unas cartitas bien privadas, y bien en confianza, explicándolo al presidente porqué decidieron abandonar su gobierno...
Tal vez la palabra clave sea esta: confianza. Tal vez este sea el problema al interior de este gobierno: la falta de confianza...
Saludos y suerte en su vida fuera del gobierno, Paolo Lüers
(Más!, EDH)